J. P. Palacios y M. Berríos

Enfrentar en forma conjunta la tramitación del proyecto de reforma tributaria presentado la semana pasada por el Gobierno resolvieron ayer los senadores y diputados de la oposición, tras una reunión de coordinación en la que participaron representantes de la DC, el PS, el PPD, el PC, el PR, el FA e independientes.

En el encuentro se analizó la iniciativa del Ejecutivo que ingresó la semana pasada a la Cámara de Diputados, con comentarios de los presidentes de las comisiones de Hacienda del Senado y la Cámara, Juan Pablo Letelier (PS) y Pablo Lorenzini (DC), respectivamente; del economista Alejandro Micco y de la directora de Igualdad, Clarisa Hardy.

Entre los asistentes también estaban los ex ministros de Hacienda Rodrigo Valdés y Nicolás Eyzaguirre; y de Energía, Máximo Pacheco.

La idea es articular una postura común en la materia, para lo cual se acordó la creación de un grupo político-técnico y otro comunicacional, de manera de establecer una coordinación permanente. El senador Carlos Montes, uno de los promotores del encuentro, aseguró que fue una "excelente reunión, estaban todos los sectores representados, en lo político y en lo técnico. La oposición está unida para enfrentar algo tan serio para el país como esta reforma estructural en materia tributaria".

El senador y presidente de la comisión de Hacienda, Juan Pablo Letelier, aseguró que "no es efectivo que se trate de una reforma modernizadora, sino de una reforma de carácter estructural sobre la base de algunas instituciones que alteran totalmente lo que se modificó en 2014".

Montes advirtió que el proyecto tiene problemas muy serios. "La integración, que beneficia principalmente a las grandes empresas, es la que mayor costo fiscal tiene. Son US$ 800 millones, y según otros cálculos, son US$ 1.000 millones". Destacó, además, que la iniciativa busca quitarle atribuciones al Servicio de Impuestos Internos (SII) y debilitar la norma antielusión.

En la oposición también se evalúa, incluso, rechazar la idea de legislar el proyecto, como una forma de presionar al Gobierno para que haya una negociación previa. "El ambiente general hoy es que no hay deseos de avanzar en la reforma tributaria tal como está. Se ha planteado no dar pie a la idea de legislar sobre esta reforma, y previo a eso abrir un espacio de conversación con el Gobierno y con sus técnicos de plantearles en qué estamos de acuerdo y en qué no y tratar de hacer una reforma de manera más conjunta", dijo el diputado Lorenzini.

En la misma línea, el senador Letelier plantea que "se tiene que estudiar si vale la pena aprobar la ideal de legislar tal cómo está el proyecto, por sus alcances y por el efecto negativo que tendría en el interés nacional".

El rechazo de la idea de legislar cobraría más fuerza con el veto anunciado por el gobierno en la tramitación del reajuste del salario mínimo.

Una de las consultas reiteradas que se le han hecho al ministro de Hacienda, Felipe Larraín, es sobre qué está dispuesto a negociar para sacar adelante esta reforma tributaria.

El ministro Larraín, consultado sobre el margen que existe para negociar la integración del sistema -uno de los puntos cuestionados por la oposición-, se limitó ayer a indicar que la reintegración resuelve muchísimos problemas, y que es un elemento muy importante del proyecto.

Otro de los temas en cuestión es el efecto neutro en recaudación que tendrá la reforma. Es por este motivo que el diputado UDI Patricio Melero proyecta que la integración, la compensación de esta y las medidas antielusión serán parte de los temas que habrá "que conversar".

El diputado RN Alejandro Santana agrega que los puntos de inflexión estarán en las medidas que el Gobierno plantee sobre mayor recaudación, y "algunas otras que la (ex) Nueva Mayoría quiera proponer, como algún impuesto o alguna tasa de royalty ; me imagino que puede aparecer algo por el estilo", dice.


Piñera y modernización tributaria: No afectará la recaudación fiscal
La cita anual del Encuentro Nacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Enape), realizada ayer, contó con la participación del Presidente Sebastián Piñera, además de los titulares de Hacienda, Felipe Larraín, y el de Economía, José Ramón Valente.

El tema que se tomó la jornada fue la propuesta tributaria del Gobierno que, según el ministro Larraín, es "el proyecto de cambio tributario más centrado en la mipyme, en toda nuestra historia tributaria".

El secretario de Estado explicó a los asistentes -compuestos por diversas agrupaciones de pequeños y medianos empresarios asociados a Conapyme- que la iniciativa legal buscará hacerle la vida más fácil a las pymes, pero no solo en tasas de impuestos, sino que, "en términos de los regímenes tributarios a los cuales se pueden adherir, (como) la nueva cláusula pyme", recalcó la autoridad.

Al finalizar el encuentro, el Presidente Piñera insistió en el punto de Larraín, explicando que las pymes tendrán una menor tasa impositiva y una facultad de depreciación acelerada o instantánea.

El Mandatario, además, comentó que las pymes tendrán "la posibilidad de que cuando el global complementario del dueño sea menor que la tasa de primera categoría, el dueño pague directamente con su menor tasa y no tenga que pagarle al fisco una tasa mayor y esperar mucho tiempo para recuperar esos recursos adicionales a los que le correspondía pagar".

El Jefe de Estado agregó que esta reforma tributaria está pensada para "fomentar el crecimiento, la creación de empleos, la productividad, la innovación, el emprendimiento, para facilitarles la vida a las pymes, para ayudar a la clase media".

Una de las discusiones que se han dado respecto de la iniciativa legal es cuál será su repercusión en las arcas fiscales. Al respecto, Piñera indicó que la reforma tributaria no disminuirá la recaudación fiscal y que significará un pequeño incremento en la recaudación tributaria.


Presidente de Fenabus es el nuevo líder de Conapyme
Tras un año en el cargo, ayer en el Encuentro Nacional de la Pequeña Empresa (Enape), Juan Araya dejó la presidencia del Consejo Nacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Conapyme), para ser relevado por el presidente de Fenabus, Marcos Carter. Ante unos 500 representantes del sector, el nuevo líder de Conapyme pidió que el millón de emprendimientos que hay en Chile tengan la oportunidad de contar con una legislación que los ampare en mayor medida que hoy.