El Mercurio.com - Blogs : Deterioro en Viña del Mar
Cartas
Domingo 18 de marzo de 2018
Deterioro en Viña del Mar
Señor Director:
En una carta, Gonzalo Yuseff descarta que en Viña del Mar existan problemas de deterioro urbano. Para no caer en un intercambio epistolar infinito, quisiera invitarlo a recorrer la ciudad para observar los problemas que describo.
Podemos partir en 15 Norte, para que vea el triste estado de la Plaza O'Higgins, con autos estacionados en platabandas y una seria congestión por la desregulación de los locales comerciales. Si caminamos por los Norte, hacia el poniente, podrá ver cómo los restaurantes y bares han invadido las aceras con tarimas y carteles y, si vamos de noche, veremos pilas de basura desparramadas sobre las veredas y ruidos que impiden dormir a los vecinos.
En San Martín, que solía ser un gran paseo turístico, tendremos que caminar con cuidado: casi un tercio de las aceras están destruidas, con restos de basura solidificados por la falta de limpieza, igual que el Parque Colombia, donde es evidente la falta de mantención de las áreas verdes, con sectores completos sin césped.
Tema aparte es el estero. El problema parte en la desembocadura con los grafitis que "adornan" los tajamares, pero luego el panorama es dantesco: microbasurales, estacionamientos y calles de tierra, rayados y un intenso olor a baño público. Saliendo por la rampa de Libertad, podríamos cruzar la plaza de Viña coronada por fachadas de edificios con publicidades de todos los colores y tamaños, para luego enfilar por calle Valparaíso hasta el terminal, donde el comercio ambulante se ha tomado las aceras, obligando a los peatones a bajar a la calle para caminar.
Podemos cerrar nuestro recorrido en Viana Álvarez, donde las estaciones de Metro están vandalizadas hace años y el maravilloso muro de mampostería de Cerro Castillo presenta rayados vandálicos en sus tres niveles, y basura en sus terrazas, además de comercio ambulante en torno al paradero.
Esta es solo una muestra del problema. La conozco por que soy vecino de la ciudad y lo alerto porque le tengo gran afecto a Viña del Mar. Por mi actividad profesional sé que es posible frenar este deterioro y que es urgente hacerlo antes de que se vuelva irreversible.
Iván Poduje Capdeville