Este radar político se va a tomar una licencia para contar una historia. Me encuentro con mi antiguo profesor John Eugene Barber Vanston. El tiempo parece que se ha detenido en él. Flaco, enjuto y frágil, con su voz cavernosa y un castellano con un poderoso acento gringo que no ha conseguido suavizar en el más de medio siglo que lleva en Chile. Este cura jesuita, nacido en Scranton (Pennsylvania), hoy tierra del voto más trumpista de EE.UU., es lo más parecido a un santo que he conocido.
En 2013, el Congreso Nacional le concedió la nacionalidad chilena por gracia por sus infatigables servicios durante casi medio siglo a los habitantes de Osorno, de Antofagasta y de Arica.
'Gene' Barber tiene hoy 85 años y está semirretirado en una casa jesuita en Estación Central. Pero sigue atendiendo a la parroquia de la Santa Cruz, vecina del Colegio San Alberto, creado en 2007 con la fusión de otros dos colegios. Esto es Los Nogales, un barrio popular creado en la década de 1940 sobre un gran fundo del mismo nombre. El padre Alberto Hurtado y el cura Vicente Irarrázaval García-Huidobro le dedicaron una gran atención a esta zona durante sus vidas.
Hace dos semanas, hubo dos muertes violentas de jóvenes en Estación Central. Eran dos jóvenes a los que Barber conocía. No apareció ninguna noticia al respecto en los medios de comunicación. El cura me cuenta que, según lo que le refirieron los vecinos, uno de ellos, al que llama Guillermo, murió cuando trataba de robar un vehículo. El dueño le disparó.
Poco después se produjo un segundo asesinato. Un joven de 21 años que tenía un hermano mellizo que al parecer estaba involucrado en el tráfico de drogas a baja escala. El asesino se equivocó de objetivo.
Hace dos domingos, antes de que el debate sobre la "narcocultura" saltara a los diarios, la parroquia de Barber estaba conmocionada con estas muertes. A 'Gene' se le saltaban las lágrimas cuando me lo contó. Son los estragos de la violencia que está asolando a nuestros barrios. La pena de muerte por robar un coche es una sanción desproporcionada. Que los ciudadanos tengan que tomar la iniciativa para proteger sus bienes y sus vidas contribuye a este resultado. El fracaso del Estado está a la vista.
'Gene' me contó que cuando algo le toca en el alma escribe poesías en inglés. No lo sabía. Y le pedí que me enviara la que le escribió al joven ladrón de coches. Se titula 'Guillermo' y dice así: "Guillermo, petty thief, bandit, hood./ Hoodlum, snatcher of autos, rebel,/ Was killed before dawn on Sunday, trying /To steal a neighbor's car. "He was no good"./ "He belonged to the mafia." / "He wasn't much cared for around here"./ A villain, most certainly. Parents long / Dead, raised by an elderly, feble / Grandmother. Uncontrolled, never / Finished Tech school, dirt poor, influenced / by bad friends. Kept afloat by dealers. / His farewell: shots in the night, / Flowers galore. Embraced by God, / Who said of him: My son".
Traducción libre: "Guillermo, pequeño ladrón, bandido, encapuchado, / matón, escamoteador de autos, rebelde, / fue asesinado antes del amanecer del domingo, intentando / robar el auto de un vecino. 'Él no era bueno'. / 'Pertenecía a la mafia'. / 'No le importaba esto' / Un villano, seguramente. Sus padres murieron / hace mucho, fue criado por una anciana y frágil abuela. / Descontrolado, nunca terminó la / Escuela Técnica, pobre y sucio, influenciado / por malos amigos. Se mantuvo a flote por los traficantes. / Su adiós: tiros en la noche, / flores en abundancia. Acogido por Dios, / quien dijo de él: Es mi hijo".