Una pupila amiga me cuenta su secreto: está embarazada.

La miro; la veo feliz. Inventará, como lo ha hecho durante toda su nada fácil vida: esta mujer global que se abrió un espacio, sola, desde su hogar sencillo en una región extrema. Inventará, con su marido, ser gran profesional y mamá.

Me sale explicarle mi paternidad.

Recuerdo la Semana de la Ciencia y la Tecnología, que comenzó en todo el país.

Los organizadores, Explora de Conicyt (www.explora.cl), dicen que la Semana es para todos. Pero yo la veo más para los niños. El descubrir de ellos nos abre los ojos.

En todo el país, en plazas, en gimnasios, en teatros: espectáculos, experimentos, charlas, muestras. Tema principal: el mar.

Me río porque en La Ligua la convocatoria es a "La dulce ciencia": el jueves a las 10 en la plaza, los escolares muestran sus descubrimientos.

Y las preguntas.

Abre un maní mi nieta Magdalena. "¿Por qué hay unos maníes con cuatro bolitas rojas y otros con dos?". No sé.

En el Jardín Botánico de Viña del Mar, el sábado 7, el espacio se abre a la curiosidad. Disfraces de temas oceánicos, juegos, talleres de astronomía, paleontología, alfarería, fabricación digital, animales marinos, matemática, anatomía...

En Santiago, funciones en el Planetario, talleres en el Museo Vicuña Mackenna, visitas al Centro del Ejercicio en Medicina de la U. Una fiesta el sábado y el domingo en el Parque Metropolitano.

En la Región de O'Higgins se abre el museo MELT de San Vicente de Tagua Tagua... y más.

En Biobío abren cuatro fiestas de la Ciencia: hoy en Concepción y mañana, en Chillán; el miércoles le toca Los Ángeles; el jueves, a Lebu. La Región de La Araucanía celebró el sábado pasado. En Los Ríos, arman visitas a laboratorios, encuentros con científicos y tendrán su fiesta. En Los Lagos, el mismo esquema; y una fiesta familiar de la ciencia en el Hotel Manquehue de Puerto Montt. En Aysén, comenzó la cosa el sábado con la obra "Yacustó" (Jacques Cousteau), y vienen fiestas en las plazas de Coyhaique y Puerto Aysén. Magallanes también culmina en una fiesta en la Plaza de Armas de Punta Arenas. Para preguntar desde los ojos de otros.

Le converso a mi amiga. Hijos y nietos me enseñan.

La Semana de la Ciencia concentra ese vaivén. Juntos, vamos a ver.

Ayer estuve en La Chimba, Antofagasta, en su fiesta de la ciencia. El Dr. Adrián Paredes conversó con la gente. Estábamos en un espacio frente a la parroquia del sacerdote Felipe Berríos. El Dr. Paredes les preguntó y les contó sobre las hierbas medicinales del desierto. Abrieron los ojos juntos. Como si el científico fuera un padre.

Mucho más, si fuera una madre. No es cuestión de igualdad de género aquí, pienso (no se lo digo a mi amiga). La mamá ya siente cómo la guagua movediza va descubriendo; antes que el padre pueda ver esos ojos abriéndose.

Ya inventará mi amiga cómo ejercer su talento profesional y su maternidad.

Son territorios nuevos para ella, los recorrerá con su pareja. El co-descubrir. Como en esta Semana de la Ciencia.