Señor Director:

Luego de apelar a que la reforma al sistema previsional apunte a uno mixto, Carlos Peña cuestiona mi aseveración respecto de que ya lo es, sosteniendo que el modelo actual se asemejaría más a las "leyes de pobres" del siglo XVII inglés que a las leyes de Bismarck. No entiendo muy bien su respuesta. Lo que sí entiendo es que el modelo de Bismarck solo protegía a los trabajadores que cotizaban y de acuerdo a su cuota proporcional respecto de sus salarios. El actual pilar solidario protege a todo trabajador, imponga o no imponga (algo que el antiguo sistema de reparto no hacía), y complementa a aquellos cuyos aportes no alcanzan para una pensión básica. Eso es un sistema mixto: un pilar de cotización individual y otro solidario, y solidario con todos los trabajadores, no solo con algunos.

Ahora, pretender que las cotizaciones particulares vayan a un fondo común debiera conllevar a un debate político previo, como Peña recomienda. ¿Queremos que los sectores de ingresos medios financien mejores pensiones a los más desposeídos sin mejorías de las propias, se afecten sus remuneraciones y ofertas laborales futuras como sucedería si el 5% adicional se destina a ese fondo común?

M. Fernanda Otero A.