Javiera Herrera y Carlos Said

"¡Digan Valdés!". Los 16 representantes de las universidades estatales estaban ordenados y listos para la fotografía oficial, cuando Ennio Vivaldi, rector de la U. de Chile, lanzó la frase para distender el ambiente. Previamente, habían estado reunidos por casi dos horas con la titular del Mineduc, Adriana Delpiano, para abordar la reforma a la educación superior; esta vez, con el proyecto en mano.

"Una vez más, nos hemos reunido con las estatales para conversar sus planteamientos, opiniones; ver las cosas que valoran del proyecto y las que quisieran mejorar", sostuvo Delpiano.

Mientras, Vivaldi indicó que en la cita "pudimos hacerle ver nuestras aprensiones, que son muchas y profundas".

El Consorcio de Universidades Estatales (CUECh) ha reclamado que el proyecto, enviado hace 10 días en la Cámara Baja, no es un verdadero fortalecimiento de los planteles públicos, no entrega nuevos recursos ni elimina lo que estiman una "visión de mercado" del sector. Y esos son algunos de los puntos que quieren corregir.

Dudas de Vivaldi

Pero ayer, los rectores también hicieron ver otra molestia: su irritación por los dichos del ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, cuando expuso parte del proyecto ante los diputados de la comisión de Educación.

"Cometió imprecisiones, fue tremendamente arbitrario en datos que mostró. Y uno dice ¿por qué ese esfuerzo tan obvio por tergiversar la realidad? ¿Qué cosas pueden haber detrás de esto? Y eso crea mucha preocupación", afirmó Vivaldi, presidente del CUECh.

Añadió que lo expuesto parece una realidad "construida para que la gente siga pensando mal de las universidades públicas a través de datos que son sumamente falsos".

El martes pasado, el ministro Valdés mostró antecedentes en cuanto a la inversión estatal en sus planteles, la matrícula y la producción académica e investigación, entre otros.

Traslado de alumnos

Otro punto que incomodó a los rectores es la idea de que las 18 Ues estatales se hagan cargo de los alumnos en caso de que una institución privada sea forzada a cerrar. "Si esa es la forma como se visualiza la expansión del sistema estatal, es como un chiste", indicó Vivaldi. Explicó que eso sería establecer que "cuando fracase el privado, ahí estaremos los públicos para asumir los fracasos".

Si bien no se mostró contrario a esa idea, el rector de la U. de Santiago, Juan Manuel Zolezzi, indicó que "es una falta de respeto hacia los estudiantes" determinarlo sin antes preguntarles. Y precisó que no porque haya una situación de crisis "tiene que estar esta obligación dada; sobre todo, por la forma por cómo se les está tratando", sin darles las condiciones mínimas de infraestructura o de recursos para que puedan absorber esos estudiantes.

Y en esa línea, el rector de la U. de Valparaíso, Aldo Valle, sostuvo que "la primera tarea del ministro de Hacienda es advertir cómo corregir la reforma, porque si ya considera que habrá universidades que cerrarán, habría que corregir el proyecto", y no determinar quiénes van a recibir a los alumnos.

Además, precisó que "los recursos nuevos que hay en el proyecto van a las universidades privadas, no a las públicas; entonces, no se les puede pedir a los planteles a los que no se les está entregando nuevos recursos que se hagan cargo de los fracasos o fallas del mercado".

"Hay una sensación de depresión, de frustración, que pensamos va a ser superada en la medida en que seamos capaces de conversar".
Ennio Vivaldi
Presidente Consorcio Ues. Estatales

"El proyecto contempla un conjunto de obligaciones para las universidades públicas que no tiene relación a cómo se financian".
Patricio Sanhueza
Presidente Agrupación Ues. Regionales

"Para mí, no es un problema de plata. Es de principio y de convicción, de que se necesita el fortalecimiento de la educación pública".
Juan Manuel Zolezzi
Rector U. de Santiago