Hay más de una película en
Free love. En la primera media hora, el centro es el conflicto de una detective del condado de Ocean, en Nueva Jersey, con su propia sexualidad. Laurel Hester (Julianne Moore) es una dedicada policía que lleva más de 20 años cumpliendo misiones heroicas contra el narcotráfico, en conjunto con su pareja profesional, Dane Wells (Michael Shannon).
En medio de uno de esos casos conoce a Stacie Andree (Ellen Page), una jovencita que queda fascinada cuando la ve, y la busca para crear una relación. Laurel desea ascender a teniente, pero está consciente de que una lesbiana tendría muy pocas posibilidades en el mundo jerárquico, masculino y conservador de la policía. Este conflicto, sin embargo, queda inconcluso, porque las cosas van en otra dirección.
La segunda película se inicia poco después, cuando ha transcurrido un año. Laurel ya ha asumido su condición, vive con Stacie y decide unirse a ella al amparo de la ley de Parejas Domésticas de Nueva Jersey, una forma de unión civil que reconoce algunos derechos patrimoniales a las parejas homosexuales.
Pero entonces Laurel es diagnosticada con un cáncer en fase terminal y el concejo del condado rechaza su petición de que su pensión como policía le sea concedida a Stacie, lo que significa que no reconocerá su condición de viuda una vez que Laurel muera. Sin esa pensión, Stacie podría perder la casa que construyeron juntas.
Esta es la película cívica, que sigue el esquema ya conocido de las cintas sobre causas sociales: la injusticia se hace pública, un agitador (Steve Carell) la convierte en el emblema de una causa mayor, el concejo se siente acorralado por la presión pública, la movilización toma ribetes épicos y...
El caso de Laurel Hester obligó al condado de Ocean a modificar la ley de Parejas Domésticas en el 2006 y siete años más tarde el estado de Nueva Jersey legalizó el matrimonio homosexual. La verdadera protagonista apareció justo antes de morir en un documental de 40 minutos, con el mismo nombre y la dirección de Cynthia Wade, que ganó el Oscar del 2007 en su categoría. Wade es una de las productoras de
Free love.
De modo que esta es una cinta cívica con una causa ganadora, como
Norma Rae o
Erin Brockovich. Es de esas historias con puras certezas, sin espacio para la duda, donde la moral y la justicia están de un solo lado, aunque la ley ande por otro, y el espectador no tiene ninguna razón para sentirse incómodo con su solidaridad. Por lo general, como en este caso, se trata de filmes eficientes, bien armados y muy correctamente contados, que no buscan la sorpresa, sino solo la emoción del triunfo social.
Como esas películas son un montón, esta es del montón.
Freeheld
Dirección: Peter Sollett.
Con: Julianne Moore, Ellen Page, Michael Shannon,
Steve Carell, Luke Grimes, Josh Charles, Tom McGowan.
103 minutos.