Tom es un niño de once años, solitario y asustadizo, que un día conoce a Hugo, un fantasma verde rechoncho y simpaticón que es mitad Pegajoso de "Los Cazafantasmas", mitad Gasparín de "Gasparín". Y todo es risa hasta que Tom descubre que la presencia de Hugo es indicio de presencias oscuras mucho más peligrosas, y se une a una experta cazadora de fantasmas, recientemente expulsada de una organización que monitorea las actividades paranormales muy a lo "Men in black". Una aventura "lejos de los padres" que recuerda a esas películas ochenteras que más de alguno recordará con cariño, pero que sin el filtro de la nostalgia se siente repetitiva y poco original. Con humor, lógica y moralejas diseñadas para su público objetivo, no es mucho lo que se puede decir al respecto, salvo que se trata de un producto muy bien ejecutado que, sin duda, entretendrá a los más chicos. Los más grandecitos ya tendrán un remake de "Ghostbusters" con el que rabiar de verdad.
"Gespensterjäger". Alemania, Austria, Irlanda, 2015. 99 min. TE + 7.