Waldo Díaz

"Nuestro agente, hasta ahora, el jurista Felipe Bulnes, nos ha propuesto que esta nueva etapa tiene exigencias distintas a la anterior, y en razón de ello me ha pedido relevarlo de su cargo. Respetando sus razones, he aceptado su renuncia", anunció ayer la Presidenta Michelle Bachelet en La Moneda.

A un lado de Bulnes, además del canciller Heraldo Muñoz y el ex secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, la Mandataria valoró la gestión del hasta entonces agente de Chile ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya por la demanda de Bolivia. "Ha sido la cabeza del equipo de abogados que permitió cautelar la soberanía en la fase de la excepción preliminar y conseguir que la demanda se viera drásticamente limitada en sus alcances", dijo.

La Jefa de Estado remarcó que la resolución del tribunal, que se atribuyó competencias para abordar la demanda, el pasado 24 de septiembre, dio "inicio de la segunda fase de la defensa chilena en este proceso. A diferencia de la fase anterior, ahora se abordarán directamente los aspectos de fondo".

Fue en este contexto en el que explicó la presencia de Insulza: "Él desempeñará con dedicación exclusiva estas funciones, porque así lo requiere la importancia de esta tarea".

Posteriormente, la Presidenta se despidió de las autoridades con un beso en la mejilla y se retiró del salón. El canciller, Bulnes e Insulza definieron en ese mismo momento cómo turnarían sus vocerías, que se extendieron por 10 minutos.

Nueva etapa

El agente ante La Haya había renunciado el 11 de noviembre, a través de una carta, a la Jefa de Estado. La situación se manejó en completo hermetismo y, según señalan en el Gobierno, la Presidenta intentó persuadirlo de su decisión. El abogado, sin embargo, no cambió su posición. En la búsqueda de reemplazantes, afirman en el Ejecutivo, Insulza fue el primero en ser contactado y con su gestión se buscará reforzar el ámbito político y comunicacional de la defensa.

"De alguna manera se había perdido la cohesión sobre el respaldo al equipo jurídico", explicó ayer Bulnes en La Moneda. En su misiva de cinco carillas volvió sobre el mismo argumento: las críticas de algunos sectores al equipo que él encabezó.

En tanto, el canciller Muñoz puso el acento en la "nueva etapa del juicio" y que "seguimos en una política de Estado, una política de unidad nacional, de salvaguardar nuestra soberanía".

Insulza fue el más escueto y valoró "la confianza que la Presidenta y el canciller depositan en mí en este momento, que es fundamental para la defensa de la soberanía de nuestro país".