Señor Director:

El ex rector don Jaime Lavados ha hecho presente el origen del llamado "Aporte Especial por Actividades Nacionales de la Universidad de Chile", que se ha incluido siempre en el Presupuesto de la nación. Es menester recordar que el fundamento de este ítem radicó en la necesidad de compensar a la primera universidad del país por las exacciones presupuestarias que sufriera en las dos décadas anteriores, en virtud de políticas destinadas a su virtual eliminación. Con posterioridad han existido siempre acciones de distintos parlamentarios pretendiendo distorsionar el propósito original o a eliminar esa partida, como también a incluir en ella destinos específicos que deberían más bien residir en la autonomía de la propia institución para asignar sus recursos.

Los intentos de reducir el presupuesto de la Universidad de Chile han sido siempre ejercidos por visiones estrechas. Así fue este año, cuando se dejó de cumplir el compromiso de gobiernos anteriores en orden al reajuste del presupuesto universitario por encima de la inflación. Así también será para el próximo, cuando el criterio de gratuidad obligue a la Universidad de Chile, como a otras instituciones, a aportar significativos recursos para financiar el déficit que creará el arancel de referencia. Asimismo será la disminución del AFI que se propone el Gobierno, en su afán de paliar el déficit de recursos para cumplir con la promesa de gratuidad, y que le costará a la Universidad de Chile por sobre los $2.000 millones.

Con criterios distintos, a veces presentados como más progresistas o simplemente eficientistas, se va provocando un creciente deterioro de los recursos que necesita la Universidad de Chile para cumplir con excelencia su misión nacional y pública.

Luis A. Riveros
Ex rector Universidad de Chile