"Poltergeist: juegos diabólicos"
De los grandes éxitos de taquilla del cine de terror comercial del último tiempo, los de James Wan ("Insidious" y "El conjuro") fueron los que más se apegaron al espíritu de "Poltergeist" (1982), el clásico producido por Steven Spielberg, que transformó los televisores en portales al más allá y llevó esas viejas historias de casas embrujadas a los suburbios actuales. Curiosamente, el remake de "Poltergeist" pareciera más interesado en imitar a James Wan que a su predecesora, y el resultado es un híbrido que no tiene nada nuevo que aportar, salvo reemplazar los voluminosos televisores cuadrados por pantallas planas y darles a los personajes tablets y smartphones. Esta vez la familia (con personajes mucho más irritantes y sin nada de la química original) llega a ocupar una casa nueva luego de que el papá (Sam Rockwell, en piloto automático) sufriera problemas económicos. Los sustos son los que uno espera: ruidos espantosos saliendo supuestamente de lo cotidiano, juguetes horrorosos (gracias, Annabelle) y creaciones digitales nefastas. Es una película sobre el más allá a la que le falta alma y espíritu, y que debiera dejar a los fanáticos anhelando el ingenio y el terror de Poltergeist... III.
EE.UU., 2015. 93 minutos, mayores de 14.
"Resucitados"Una buena película de terror puede tener actuaciones más que dignas como lo que hacen aquí Mark Duplas y Olivia Wilde. Puede tener una dirección hasta elegante y llena de buenas imágenes, como la de David Gelb ("Jiro dreams of sushi", 2011). Puede tener un buen concepto probado en muchas películas del género, como el de los científicos que buscan reanimar a los muertos. Puede tener todo esto, y aún así terminar siendo una experiencia frustrante que no da con el mínimo de coherencia, verosimilitud ni tensión. Wilde y Duplas son una pareja que trabaja en el avance científico más espeluznante de la historia con apenas un par de estudiantes en un laboratorio de mala muerte, y que ya ha resucitado con éxito varios animales. Hasta que un día Wilde muere en un improbable accidente y Duplas decide dar el paso de traer de vuelta a un ser humano. Siguen los clásicos sustos baratos de ruido repentino, las voces que suelen penar en 5.1. surround, y los "dilemas" entre religión y ciencia, pero nada resulta creíble ni espeluznante. Así es que salvo que usted se asuste con mujeres hermosas de ojos completamente negros, absténgase.
"The Lazzarus effect". EE.UU., 2015. 83 minutos, mayores de 14.