"Lugares oscuros"

Otra adaptación de Gillian Flynn que tiene en su ADN varios elementos comunes con "Perdida", su anterior hit: crímenes, muchos giros sobre la marcha y un "remix" de la clásica femme fatale a la cabeza de todo. Esta vez, cuenta la historia de una atormentada Charlize Theron que sigue viviendo a la sombra de un confuso crimen que acabó con toda su familia, y cuyo culpable aparente fue su hermano mayor. Hoy, una organización de nerds de la crónica roja la empuja a investigar más allá y descubrir la verdad de lo que pasó esa noche de sangre fría. Lo que sigue es una investigación que mantiene el interés exclusivamente gracias al poder del misterio, pero que rápidamente cae en una dinámica de narración perezosa, donde los entrevistados se limitan a contarnos cosas que no tendríamos por qué saber, todo mientras los flashbacks en paralelo van llevando los hechos a resoluciones ni tan sorprendentes ni tan satisfactorias. Las actuaciones y la dirección compensan el realismo que le falta a la historia, pero así y todo se alargan los minutos con soliloquios de personajes explicando por qué hicieron lo que hicieron. Por algo Fincher se quedó con la otra novela. "Dark places". Francia, 2015. 113 minutos, mayores de 14.

"¡Asu Mare! 2"

Esta es una secuela de uno de los más grandes éxitos de taquilla del cine peruano, que sigue las aventuras de "Cachín", un comediante que pese a tener un exitoso sitcom en televisión, sigue siendo "del pueblo". Esta vez, nuestro héroe se enamora de una guapa y adinerada chica a la que le miente constantemente sobre su posición social, y es esta la débil premisa sobre la que se construye toda la comedia: situaciones incómodas como ir a exposiciones artísticas o a un restorán elegante, no saber llegar en transporte público al barrio alto, y así. Y aunque la mirada es infantil y dolorosamente populista, ahí mismo está la gracia. Una suerte de "El chavo del 8" crecidito y enamoradizo, moviéndose entre viñetas de humor más o menos exitosas, y con un "mensaje" tan sutil como un martillazo en la cara. Perú, 2015. 100 minutos, todo espectador.