Señor Director:

Con consternación y dolor terminé de leer el testimonio del Dr. Aníbal Faúndes publicado ayer sábado.

El Dr. Faúndes declara que se practicaron más o menos seis mil abortos en el Hospital Barros Luco durante el año 1973. Esta altísima cifra demuestra que las mujeres que piensan en un aborto no es ni porque fueron violadas ni porque el niño venía enfermo, sino por razones principalmente económicas. Hay que apuntar entonces en ese sentido con políticas públicas que apoyen a las madres de escasos recursos que se encuentran en esa situación y a las jóvenes que, lamentablemente para ellas y sus hijos, quedan embarazadas por irresponsabilidad e inconciencia.

¿Nos duele hasta el alma ver el maltrato infantil en un reportaje y no nos duele un aborto porque no lo vemos?

La ciencia nos ha permitido ver.

No nos ceguemos ante la realidad de la vida.

M. Teresa Bull Rahausen