Señor Director:

Respecto de las recientes declaraciones del contralor general de la república sobre la necesidad de que las universidades privadas transparenten el uso que dan a los dineros públicos que reciben, es necesario recordar que al discutirse el presupuesto 2014 denuncié que la entonces ministra de Educación, Carolina Schmidt, no patrocinó una indicación para que el manejo de los US$ 1.000 millones de dinero público que recibirían en 2014 las universidades privadas, sea fiscalizado por la Contraloría General de la República y estuviera sujeto a la Ley de Transparencia y al portal Mercado Público.

Ese monto equivale al 60% del presupuesto nacional para universidades; es decir, las estatales solo reciben el 40% y tienen todos los controles.

Los dineros públicos son de todos los chilenos y es indignante que mientras en el ámbito público hay miles de estudiantes y maestros trabajando en condiciones de enorme pobreza en todas las ciudades y pueblos de Chile, haya traspasos millonarios de dineros públicos a universidades privadas, que no son fiscalizados como sí sucede con las universidades estatales.

Es de esperar que de una vez por todas sí se establezca esta obligación de transparencia en el presupuesto 2015, dejando atrás el poderoso tráfico de lobby que al parecer vienen realizando algunos desde hace años, no conformes con el 60% del presupuesto estatal que reciben sin control público.

Víctor Pérez Vera
Ex rector Universidad de Chile