Esta película tiene un penetrante aire de autoayuda, se basa en un best seller de Jonathan Tropper y es la película más adulta del canadiense Shawn Levy, director de la exitosa "Una noche en el museo" (2006) y sus secuelas, además de "Gigantes de acero (2011) o "Aprendices fuera de línea" (2013).
En otras palabras: una filmografía que está en la parte baja de la tabla.
"Hasta que la muerte los juntó" es una película con vocación por la terapia amateur y la sanación familiar, y por encima o por debajo de la alfombra no hay esquirlas críticas ni acidez por las instituciones y nada que corroa con ironía o cinismo.
El universo es amable, reinan los consejos voluntariosos y largos, y la mayor curiosidad puede estar en el personaje de Hilary Altman (Jane Fonda), que enviuda y les pide a sus cuatro hijos que compartan un ritual fúnebre judío. Esto significa que durante varios días deben acompañarla en la casa familiar y también en el recogimiento y los recuerdos.
Cada uno de los hermanos instalará algún conflicto de pareja que son como los capítulos de un libro donde se presenta un problema específico -adulterio, inmadurez emocional o secretos familiares- y al mismo tiempo se despacha la receta.
Judd (Jason Bateman), el protagonista, aún permanece atontado por lo que descubre de sopetón al inicio de la película y pleno dormitorio: su jefe se acuesta con su esposa. Judd cumple el rol del hombre desolado que debe reinventarse en el barrio y suburbio donde se crió. Y en la vecindad, para su fortuna, reside la mujer que fue su primer amor.
Wendy (Tina Frey) vuelve con su esposo y un hijo pequeño cuya única gracia es el uso y abuso que le da un baño plástico y portátil. Wendy no es muy feliz en su matrimonio, pero tiene tolerancia y se reencuentra con un vecino que también fue su primer amor. Se llama Horry y es cierto que después de un accidente perdió algunas capacidades motoras, pero no las esenciales.
Paul (Corey Stoll), el hermano mayor, nunca se fue del barrio, atiende el negocio familiar y su único pesar es que su esposa no logra quedar embarazada.
Y Philip (Adam Driver), finalmente, es el menor, el irresponsable y el bueno para nada que llega con una nueva novia.
Esta es una familia disfuncional coronada por la viuda Hilary, el personaje de Jane Fonda, una reina madre de 76 años que luce cada vez que puede un perfil y una figura atípica para alguien de esa edad. Esbelta y sin nada patuleco a simple vista. Y además los mejores chistes de la película se deben a su voluminosa tarjeta de presentación: un par de senos enormes, falsos y prostáticos.
"Hasta que la muerte los juntó", como ya se dijo, es la película más adulta de Shawn Levy, y de acá surge la evidencia definitiva: su especialidad son las películas para niños chicos. Y bien chicos.
"This is where I leave you". EE.UU., 2013. Director: Shawn Levy. Con: Jason Bateman, Tina Frey, Jane Fonda. 103 min.