Señor Director:

Como capítulo chileno de Transparencia Internacional no podemos estar más de acuerdo con el editorial de "El Mercurio" publicado el miércoles 28 de agosto, respecto de la necesidad de lograr en Chile un cambio cultural en la materia.

Aprovecho de agregar un reconocimiento al Consejo para la Transparencia, que ha sido vital para que se cumpla el espíritu de la Ley 20.285, que garantiza el acceso a la información pública. Sin su labor, probablemente ese cuerpo legal hubiera quedado en letra muerta. Su última cuenta pública revela los avances de los entes públicos en el cumplimiento de la ley, pero muestra al mismo tiempo que la ciudadanía todavía desconoce los derechos que esa norma garantiza.

Para seguir avanzando es indispensable la adopción de buenas prácticas por parte de las organizaciones de la sociedad civil y el sector privado. Por eso, como Chile Transparente, hemos invitado a los partidos políticos a elevar sus estándares en la materia. Sería igualmente oportuno que las universidades privadas que reciben aportes estatales se sumaran voluntariamente a las exigencias de transparencia activa que la ley les exige a las universidades públicas.

José Antonio Viera-Gallo
Presidente de Chile Transparente