Señor Director:

Por estos días aparece en los medios que connotados edificios públicos se encuentran sin seguros en caso de terremoto o incendio.

Mientras nos desempeñábamos en la alcaldía de Santiago, en 1981, pese a la crisis económica de la época, procedimos a asegurar la totalidad de los edificios históricos pertenecientes a la I. Municipalidad de Santiago, lo que permitió que a pocos meses de ocurrido el terremoto de 1985, se pudiera iniciar la reconstrucción y restauración total del Palacio Consistorial de la Plaza de Armas, severamente dañado, y del edificio municipal contiguo, frente a la iglesia de Santo Domingo, así como también la reparación y restauración total del Teatro Municipal, del Palacio Cousiño, del Museo Precolombino, de la Casa Colorada y de otras propiedades municipales.

Se salvaron edificios de incalculable valor histórico y patrimonial. Para tenerlo en cuenta, más aún cuando las condiciones económicas del país son infinitamente más favorables.

Carlos Bombal Otaegui