El Mercurio.com - Blogs : Episcopado pide evitar que, vía subvención, el Estado imponga una enseñanza unificada
Noticias
Martes 22 de abril de 2014
Episcopado pide evitar que, vía subvención, el Estado imponga una enseñanza unificada
El texto de 12 páginas ya está en manos del ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, y de la ministra secretaria general de la Presidencia, Ximena Rincón...
Pamela Gutierrez
La Conferencia Episcopal dará a conocer hoy la posición de la Iglesia Católica chilena sobre la reforma educacional. Y lo hará en forma digital, subiendo al sitio www.iglesia.cl el documento "Iglesia y Educación".
"Hacer clases es una experiencia muy bonita", dice el presidente del Área de Educación del episcopado, el obispo de Temuco, monseñor Héctor Vargas, autor del texto y profesor de Estado, con 30 años de experiencia.
"Se han hecho grandes anuncios a nivel de titulares, sin dar a conocer los contenidos, y eso se ha prestado para un debate sobre cosas de fondo que no están totalmente definidas. Eso, más que ayudar, suele crear desconcierto", dice a "El Mercurio" desde Temuco.
Monseñor Vargas se reunió durante dos horas, el 9 de abril, con el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre. "Le presenté algunas preocupaciones que hay en el sistema, no solamente de parte de la Iglesia", explica.
Detalla que la Iglesia coincide "plenamente" en la necesidad de una reforma educacional, pero "muchísimo" más amplio que lo planteado. En su opinión, el debate se ha centrado en aspectos económicos, "y está pendiente qué vamos a entender por educar".
Según datos de la Iglesia, en 2012 había 846 colegios católicos en Chile (6,9% del total), con 596.586 alumnos (16,8% de la matrícula nacional).
Monseñor Vargas distingue entre admisión y selección: "No es lo mismo. En un proceso de selección, es la escuela la que selecciona quién ingresa y quién no, según ciertos parámetros. Y si esos son económicos, estudios, situación familiar u otros, evidentemente, no los compartimos. En cambio, la admisión es un proceso en que colegio y padres se interiorizan y conocen un proyecto educativo sobre el cual las familias toman la decisión, después de informarse, de si quieren educar a sus hijos ahí".
Subvención con condiciones
Sobre la subvención estatal y el financiamiento compartido, precisa que el principio de la subvención permite a los padres de menos recursos poner a sus hijos en colegios particulares. Hoy, afirma el obispo, toda la subvención se destina a pagar sueldos y "las escuelas están viviendo solo del financiamiento compartido para todo lo demás". Agrega que hay colegios que ocupan hasta el 25% de ese financiamiento para salarios.
"El Estado de Chile ha comenzado gradualmente a usar la subvención como un medio, o sea 'te entrego la subvención, pero te pongo condiciones', y al ponerte condiciones, te estoy diciendo en qué puedes gastar la plata y en qué no puedes gastarla. Esa no es la finalidad de la subvención".
El documento de la Conferencia Episcopal plantea que "si efectivamente hay razones objetivas de fondo" para eliminar el financiamiento compartido, es "imprescindible" que se respete la finalidad para la cual las familias hacen hoy su aporte, en cuanto a que los colegios tengan más recursos para implementar "con toda libertad" las características de su propio proyecto educativo. "Nuestra preocupación no es un tema de dinero, porque el financiamiento estaría asegurado, sino de principios y derechos, como el de la libertad de enseñanza", concluye.
Las claves del pronunciamiento de la Iglesia Católica
1 Sistema mixto. El documento plantea la existencia de un consenso social en Chile para que se mantenga la provisión mixta en educación, por los numerosos aportes que ha realizado al país. Para que ello ocurra, advierte, se requiere que la educación particular pueda seguir funcionando con las características propias de su naturaleza. "Ello implica disponer de un amplio espacio para construir sus proyectos educativos, para llevarlos a cabo de acuerdo a su filosofía y estilo educacional, y para gestionarlos desde el punto de vista curricular, pedagógico y económico".
2 Admisión. Sostiene que los procesos de admisión son necesarios, pues su objetivo es informar a los padres sobre las características del proyecto educativo que formará a sus hijos, "y al que ellos, en caso de compartirlo, no solo deben adherir, sino comprometerse activamente en su realización". En las escuelas católicas, añade, "la confesionalidad no se limita a la clase de religión, sino que toda su propuesta está inspirada en una visión cristiana de la vida, del ser humano, del currículo, de la historia, de la sociedad, de los valores (...) Lo anterior no dice relación ni justifica sistemas de selección por razones económicas, de rendimiento o de situación familiar que resultan discriminatorios y contrarios al modo cristiano de educar".
3 "Impensable" sistema unificado. El texto cita el Concilio Vaticano II y su pronunciamiento para que los padres "gocen de verdadera libertad en la elección de la escuela" y para que, al distribuir las ayudas públicas, el Estado procure que los padres puedan ejercerla. "Se trata de evitar en el futuro que el Estado, mediante nuevas exigencias y condiciones para otorgar la subvención (...), pueda ir unificando el sistema educacional chileno", haciendo que las escuelas subvencionadas, municipales y particulares, al margen de sus proyectos y características, "se vean obligadas a funcionar de manera similar en lo curricular, disciplinario, ambiental, organizativo y financiero. La sola posibilidad de acercarnos a un modelo escolar único, impuesto por el Estado a todo el sistema subvencionado, donde acuden mayoritariamente los pobres y la clase media, resulta impensable".
4 "Efectos perversos". "Más serio es aún cuando las escuelas municipales y particulares subvencionadas, como las pagadas, son sometidas sin distinción a sistemas nacionales estandarizados de evaluación, en virtud de los cuales se las clasifica como exitosas o deficientes (...) Son criterios de 'calidad' que no podemos compartir, por sus efectos perversos, de comparación de lo que no es comparable, de estigmatización de los pobres, y que no dan cuenta de la enorme entrega y grandes logros de maestros en campos no medidos".