Señor Director:

El incendio de los cerros de Valparaíso nos va a llevar a un largo debate sobre la responsabilidad de haber permitido la construcción de miles de viviendas en los cerros quemados en condiciones de riesgo.

Es cierto que los lugares donde se construyeron estas viviendas no son apropiados, y quizás varios de ellos están fuera de norma, pero no hay que olvidar que tanto las situaciones de pobreza como de riqueza logran siempre hacer de las suyas con las normas urbanísticas (planos reguladores). La falta de terrenos para los más vulnerables y la urgente necesidad de viviendas sociales a través de subsidios estatales hacen que ellas se levanten muchas veces en lugares riesgosos.

Así también sucede cuando a los municipios se les presentan buenos proyectos de viviendas caras en que para construirlas se estiran las normas hasta permitirlas o simplemente a través de seccionales se logra sobrepasar los planos reguladores.

Como vemos, desde ópticas tan distintas (y distantes) la planificación de la ciudad requiere de adecuaciones urgentes que no olviden, además de las normas sobre construcción y planificación, los riesgos, la dignidad de los vecinos, una red vial acorde con los tiempos y un buen sistema de transporte público.

Herman Chadwick Piñera