Se estrenaron dos películas de ciencia ficción este fin de semana. Una, "Star Trek: en la oscuridad", relata las aventuras de una tripulación que cruza el espacio a la velocidad de la luz arriba del Enterprise. La otra nos lleva a las oficinas de Google en California, donde los autos se manejan solos, la comida se regala y, más increíble aún, dos ex vendedores de relojes (Vince Vaughn y Owen Wilson), cuarentones, ignorantes de lo que es un código HTML, un chat o prácticamente cualquier herramienta digital, son admitidos para realizar una práctica de trabajo. Si eso no es ciencia ficción, difícil saber qué lo es. Esta última cinta, "Aprendices fuera de línea" -pésima traducción para un título que sólo debiera ser "La práctica" ("The Internship")- es, claro, una comedia y en consecuencia se ríe de la desadaptación de los viejos, al tiempo que se compadece de la torpeza de los jóvenes nerds que sí entienden el mundo digital pero poco del mundo real. "Aprendices" es una cinta amable, donde la energía incombustible de Vaughn y Wilson ponen algunas risas y Google se convierte en una suerte de paraíso. No es raro. Es de ese tipo de historias que cumplen con un rol social: hacer más amable la tecnología o, mejor dicho, nuestra relación con la tecnología. Como lo hacían las novelas de Julio Verne en la segunda mitad del siglo XIX, cuando las máquinas recién comenzaban a ser una presencia cotidiana, películas como ésta permiten que el desarrollo tecnológico actual se sienta más comprensible y acogedor, especialmente cuando "Aprendices" también describe un mundo donde las brechas de edad, de raza y de clase social no constituyen un impedimento para el trabajo en equipo, la convivencia ni el desarrollo, sino un motor, una riqueza, donde cada uno cumple su papel y colabora desde su propio ámbito, desde su propio lugar en el mundo, lo que a su vez reasegura su lugar en la comunidad. En otras palabras, la cinta es una obvia -y algo gruesa- celebración de la sociedad democrática y liberal construida por Estados Unidos.

"Star Trek", en cambio, es una historia de desadaptados, donde nadie parece pillar su lugar en el mundo. El capitán Kirk (Chris Pine) tiene serios problemas con la autoridad, con los procedimientos que sus responsabilidades le exigen y con el control de sus impulsos; Mr. Spock (Zachary Quinto), su segundo de a bordo, es el último representante de una raza extinta y aunque controla sus impulsos y conoce sus responsabilidades, tiene serios problemas para manifestar sus sentimientos y, por lo tanto, para establecer vínculos; y Khan (Benedict Cumberbatch), el enemigo, que en rigor no es un simple criminal sino un marginado, que lucha por la sobrevivencia de su pequeño grupo de pares. No vale la pena detenerse en la anécdota de esta entrega, porque esta cinta de J.J. Abrams ("Super 8"), bajo los giros de guión y de los efectos especiales, en realidad está interesada en las desventuras de Kirk y Mr. Spock, especialmente en dar cuenta de cómo Kirk se equivoca, pelea con sus amigos, lee mal a sus enemigos y arriesga constantemente la vida de su equipo; un héroe al que todo, o casi todo, le resulta mal. Spock, en cambio, muestra mucho mejor tino y juicio, pero su frialdad lo convierte en un ser incomprendido la mayor parte del tiempo.

Para ser una película de ciencia ficción y gran presupuesto, "Star Trek" es mucho más interesante que los blockbusters que se han estrenado esta temporada. J.J. Abrams filma y monta con una plasticidad que lo emparenta con Brian de Palma y ciertamente sabe cómo poner atención a sus personajes. Kirk o Mr. Spock son muchísimo más complejos que el Clark Kent de "El hombre de acero" o los pilotos cabeza de músculo de "Titanes del Pacífico". Dentro de las limitaciones del género, ocupa a sus personajes para mantener una tensión que va más allá de lo estrictamente argumental. Para comparar su cinta con "Aprendices", sabe que es mucho más interesante poner a dos (o tres) personajes que se llevan a patadas con el mundo que poner a dos personajes que sólo están interesados en caerle bien a todo el mundo.

APRENDICESFUERA DELÍNEA
Dirección: Shawn Levy.
Con: Vince Vaughn, Owen Wilson y Rose Byrne.
País: Estados Unidos, 2013.
Duración: 119 minutos.

STAR TREK: EN LA OSCURIDAD
Dirección: J.J. Abrams.
Con: Chris Pine, Zachary Quinto, Zoe Saldana.
País: Estados Unidos, 2013.
Duración: 132 minutos.