Señor Director:
La
carta suscrita por 94 académicos y publicada el sábado pasado da a entender que si un Estado tiene el deber de proteger la vida humana prenatal su legislación no puede autorizar el aborto en caso alguno. Ese argumento es incorrecto, confunde al lector y ha sido desestimado por los legisladores y los tribunales constitucionales más importantes de occidente.
1. Es un principio reconocido que la ley no está llamada a exigir conductas heroicas. No corresponde que lo haga sólo respecto a las mujeres, sin perjuicio de que ellas puedan optar por realizarlas. Si una mujer decide mantener un embarazo que puede llevarla a la muerte o que es producto de una violación, su decisión está amparada por la Constitución. Podremos admirar a esa mujer por estar sacrificándose mucho más allá de lo que la mayoría de nosotros sería capaz de hacer y más allá de lo que como sociedad podemos pedirle. Lo que está claro es que no podemos, como ahora lo hacemos, castigarla por no ser heroica.
2. El objetivo de la política estatal debe ser bajar la tasa abortos y para eso la ley debe adoptar medidas efectivas. De acuerdo a los estudios internacionales más prestigiosos de salud pública y a la propia Organización Mundial de la Salud, la penalización no es efectiva para disminuir los abortos. No es legítimo imponer una pena que no cumple con el objetivo que justifica su existencia.
3. Hay medios más efectivos para bajar las tasas de aborto, que se enfocan en la prevención de embarazos no deseados, que buscan trabajar con las mujeres y no contra ellas y que por eso son respetuosos de la dignidad de las mujeres. Esos son los medios que se está priorizando en el derecho comparado, con éxito. Países que al igual que Chile tienen un mandato constitucional de proteger la vida prenatal, han despenalizado el aborto temprano y cumplen ese deber mediante regímenes más efectivos basados en la prevención. Sus tribunales constitucionales han considerado estos regímenes legales compatibles con la constitución. La penalización estricta ha mostrado ser un fracaso para evitar abortos; sólo es exitosa en crear un mercado siniestro de abortos clandestinos, que puede poner en peligro la vida y salud de las mujeres y que las somete a situaciones humillantes. Quienes realmente se interesan por proteger la vida prenatal no deberían sentirse orgullosos de insistir en la criminalización, que sólo produce sufrimiento y no salva vidas.
4. Todos los organismos de derecho internacional de derechos humanos a nivel global y regional han afirmado que la protección de la vida prenatal es un objetivo legítimo, pero debe implementarse asegurando la protección de la vida, salud y dignidad de la mujer embarazada y no a costa de ellas.
5. Lo dicho es plenamente compatible con la Constitución de 1980: su redacción tuvo precisamente como objetivo permitir al legislador despenalizar parcialmente el aborto.
Si vamos a discutir sobre la regulación legal del aborto, lo mínimo es hacerlo con todos los antecedentes relevantes a la vista. Lamentablemente, el Tribunal Constitucional chileno no ha sido capaz de hacerlo hasta el momento. Por lo visto, los 94 académicos que suscribieron esa carta, tampoco.
Profesoras de Derecho firmantes:
Lidia Casas, Universidad Diego Portales (UDP)
María Inés Horvitz, Universidad de Chile (UCH)
Verónica Undurraga V., Universidad Adolfo Ibáñez (UAI)
Alejandra Zúñiga, Universidad de Valparaíso (UV)
Yanira Zúñiga, Universidad Austral (U. Austral)
Profesores de Derecho adherentes:
Felipe Abbott, UCH
Daniela Accatino, U. Austral
Marcela Aedo, UV
Luppy Aguirre, UCH
Bernardo Alarcón, U Austral
Angie Armer, UAI (profesora adjunta)
Isabel Arriagada, UCH
Paulina Astroza, U. de Concepción
Fernando Atria, UAI
Antonio Bascuñán R., UAI
Jaime Bassa, UV
Alicia Bobadilla, UCH
Guillermo Caballero, UAI
Jorge Contesse, Rutgers / UDP
Emanuele Corn, UV
Eduardo Court, UAI
Juan Pablo Cox, UAI
Felipe de la Fuente, UAI
Susana Espada, UAI
Jorge Ferdman, UCH
Ximena Fuentes, UAI
Sergio Gamonal, UAI
Marcelo Guerrero, UCH
Catalina Guidi, UAI
José Luis Guzmán, UV
Osvaldo Lagos, UAI
Soledad Lagos, UCH
Lorena Lorca, UCH
Juan Pablo Mañalich, UCH
Gonzalo Medina, UCH
Héctor Morales, UAI (instructor)
Alvaro Nuñez, U Austral
Felipe Paredes, U Austral
Esteban Pereira, UAI (instructor)
Pamela Prado, UV
Sebastián Ríos, UCH
Judith Schonsteiner, UDP
Adrian Schopf, UAI
Francisco Saffie, UAI
Constanza Salgado, UAI (instructora)
Ema Salinas, UCH
Miguel Soto, UCH
Mauricio Tapia, UCH
José Miguel Valdivia, UAI
Jonatan Valenzuela, UCH
Luis Villavicencio, UV