En los próximos seis días se podría conocer con certeza la fecha en que comenzará el cónclave para elegir al nuevo Papa, luego que el Vaticano confirmara ayer que Benedicto XVI "está considerando" revisar las reglas para la elección de su sucesor.
Según la constitución apostólica vigente, el cónclave debe empezar "entre un mínimo de 15 días y un máximo de 20" desde que se decrete la llamada "sede vacante". En este caso, está fijada para el próximo 28 de febrero a las 20:00 horas, cuando se haga efectiva la renuncia de Benedicto XVI, por lo que el 15 de marzo sería la presunta fecha de inicio.
Pero, ese plazo de 15 a 20 días fue determinado asumiendo que el Papa ha muerto, que se llevará a cabo su funeral y que los cardenales deben tener un tiempo para llegar a Roma.
Al convertirse Benedicto XVI en el primer Papa en renunciar a su cargo en 600 años, las cosas son diferentes, pues los cardenales ya saben que el pontificado concluirá el 28 de febrero y pueden desplazarse a Roma con tiempo de sobra.
"El Papa está considerando la publicación de un 'motu proprio' en los próximos seis días", señaló el padre Federico Lombardi, portavoz del Vaticano, refiriéndose a un decreto papal donde se establecen las reglas eclesiásticas.
Eso "aclararía algunos temas específicos" respecto del cónclave de cardenales que elegirá a un nuevo Papa. "Yo no sé si él considerará necesario u oportuno emitir una aclaración sobre la cuestión del inicio (del cónclave)", añadió Lombardi.
El Papa presidirá su última audiencia el día 27, que se celebrará en la Plaza de San Pedro y se prevé multitudinaria. Al día siguiente, a las cinco de la tarde, se desplazará en helicóptero a la residencia veraniega de Castel Gandolfo.
Inédita salida
La salida de Benedicto XVI del helipuerto vaticano marcará un hito en la historia de la Iglesia por su peculiaridad y será retransmitida en directo por televisoras de todo el mundo.
La señal la dará el Centro de Televisión Vaticano, cuyo director, monseñor Dario Edoardo Maria Viganò, ha asegurado que la partida de Benedicto XVI "será un evento histórico".
Una vez en Castel Gandolfo, el Papa todavía ese día puede asomarse a la ventana del Palacio a saludar a los congregados como sucesor de Pedro, su último saludo antes de que den las ocho de la tarde.
A partir de esa hora, Ratzinger cambiará su impoluta sotana blanca por un sobrio traje negro que, al salir a la intemperie, cubrirá con un abrigo del mismo color. En la cabeza llevará una sencilla boina, que en italiano llaman "vasca".