Señor Director:

En una reciente emisión de la teleserie “Reunión de Superados” se mostró una escena en la que una madre, afectada emocionalmente, sostenía a su hija lactante mientras manifestaba pena y dolor. La menor, visiblemente alterada, lloraba en pantalla.

Considerando que los niños de tan corta edad son especialmente sensibles a los estímulos emocionales y no distinguen entre ficción y realidad, resulta legítimo preguntarse cómo se resguarda su bienestar durante la grabación de escenas de alta carga emocional. ¿Existen protocolos claros para evitar exponer a lactantes a situaciones que puedan generarles estrés? ¿Cuenta este tipo de producciones con supervisión de organismos de protección de la infancia?

Estas interrogantes merecen ser abordadas, especialmente en un contexto donde la televisión cumple un rol formativo y social relevante.

Iván Calderón D.