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Jueves 18 de diciembre de 2025
Los insultos del Presidente Petro
Señor Director:
Los insultos del Presidente Petro en contra del Presidente electo, José Antonio Kast, son absolutamente inaceptables y constituyen una ofensa no solo para él, el ofendido, sino para el país entero.
Nadie puede llamar a otra persona “nazi”. Este no es un insulto cualquiera. Los años del imperio del nacionalsocialismo en Alemania (1933-1945) pueden ser considerados como el período más oscuro de la historia de Occidente, dado el grado inverosímil de tiranía, crueldad, arbitrariedad y número de crímenes cometidos por los gobernantes.
Todo lo que uno imagine que fueron esos años de horror habría que multiplicarlo por 1.000: cientos de campos de concentración, desde campos de trabajos forzados y amedrentamiento a la población civil a los de exterminio de enfermos mentales y el Holocausto judío, millones de personas asesinadas o sometidas a torturas o a experimentos médicos, etcétera. Y todo esto en solo 12 años. ¡Qué eficiencia diabólica!
Pero no solo sufrieron los perseguidos por motivos raciales y los prisioneros de guerra, sino también las personas comunes y corrientes que caían bajo la sospecha de oponerse al régimen.
El Conde Helmuth von Moltke, jurista y miembro de la Resistencia, camuflado en el Ministerio de Justicia hasta que fue descubierto y ejecutado después del fracasado atentado contra Hitler del 20 de julio de 1944, hizo llegar a Inglaterra un informe acerca del número de ejecuciones “legales” de enemigos políticos que se llevaban a cabo en las distintas cárceles alemanas: el promedio era de 100 diarias (M. von Dönhoff, 1994, p. 111).
Es cierto que el comunismo soviético superó largamente al nazismo en cuanto al número de víctimas, pero estos crímenes ocurrieron en un período más largo y sin estar acompañados de los extremos de crueldad a los que se llegó durante el nazismo.
No, no se puede tratar a ninguna persona como nazi, y menos a alguien que ha sido elegido Presidente democráticamente y por una abrumadora mayoría. El señor Petro ha demostrado con sus dichos ignorar lo que significa el mínimo respeto a otro ser humano, pero también desconocer la historia.
Otto Dörr
Los insultos del Presidente Petro en contra del Presidente electo, José Antonio Kast, son absolutamente inaceptables y constituyen una ofensa no solo para él, el ofendido, sino para el país entero.
Nadie puede llamar a otra persona “nazi”. Este no es un insulto cualquiera. Los años del imperio del nacionalsocialismo en Alemania (1933-1945) pueden ser considerados como el período más oscuro de la historia de Occidente, dado el grado inverosímil de tiranía, crueldad, arbitrariedad y número de crímenes cometidos por los gobernantes.
Todo lo que uno imagine que fueron esos años de horror habría que multiplicarlo por 1.000: cientos de campos de concentración, desde campos de trabajos forzados y amedrentamiento a la población civil a los de exterminio de enfermos mentales y el Holocausto judío, millones de personas asesinadas o sometidas a torturas o a experimentos médicos, etcétera. Y todo esto en solo 12 años. ¡Qué eficiencia diabólica!
Pero no solo sufrieron los perseguidos por motivos raciales y los prisioneros de guerra, sino también las personas comunes y corrientes que caían bajo la sospecha de oponerse al régimen.
El Conde Helmuth von Moltke, jurista y miembro de la Resistencia, camuflado en el Ministerio de Justicia hasta que fue descubierto y ejecutado después del fracasado atentado contra Hitler del 20 de julio de 1944, hizo llegar a Inglaterra un informe acerca del número de ejecuciones “legales” de enemigos políticos que se llevaban a cabo en las distintas cárceles alemanas: el promedio era de 100 diarias (M. von Dönhoff, 1994, p. 111).
Es cierto que el comunismo soviético superó largamente al nazismo en cuanto al número de víctimas, pero estos crímenes ocurrieron en un período más largo y sin estar acompañados de los extremos de crueldad a los que se llegó durante el nazismo.
No, no se puede tratar a ninguna persona como nazi, y menos a alguien que ha sido elegido Presidente democráticamente y por una abrumadora mayoría. El señor Petro ha demostrado con sus dichos ignorar lo que significa el mínimo respeto a otro ser humano, pero también desconocer la historia.
Otto Dörr
