Señor Director:

Tras el suicidio del general (r) Hernán Chacón este 29 de agosto, escribo para dar a conocer la verdad de estos hechos.

Una vez más la justicia no solo tarda, sino que se equivoca. Tras el golpe militar, el entonces mayor Hernán Chacón fue destinado al Estadio Chile para controlar, desde la calle, su acceso y salida.

Desde que fuera acusado de tortura y asesinato de Víctor Jara enfrentó la justicia dando a conocer su inocencia, puesto que nunca estuvo en el lugar de los hechos ocurridos al interior del Estadio y, existiendo otros oficiales de grado o mando superior al suyo, tampoco supo quiénes los llevaron a cabo. Dado el tiempo transcurrido, aquellos oficiales que podrían haber testificado por haber estado físicamente cercanos a él, ya fallecieron.

Algunos medios de prensa divulgaron parte de la verdad; manifestaron que el calibre de las balas encontradas en el cuerpo de Víctor Jara correspondían al revólver de Chacón, pero lo que obviaron decir es que ese tipo de arma era la misma de todos los oficiales allí presentes.

El Presidente Boric calificó como cobarde este suicidio. Pienso que nadie está en condiciones de opinar respecto de una decisión tomada frente a la impotencia y pérdida de esperanza. El mandatario, por quién yo voté, debe tener presente que desempeña un cargo como Presidente de todos los chilenos, civiles y militares, como lo planteó tan claramente el presidente Aylwin.

No puede seguir dándose gustitos y dar opiniones que favorezcan a aquellos grupos con los que se siente más identificado. No todos los chilenos coincidimos con sus gustos.

Su aclaración respecto de este tema no fue precisa. Hernán Chacón nunca esquivó la justicia. La enfrentó durante largos años. Lo que hizo fue dar un corte definitivo al largo e injusto proceso que por años vivió. Estuvo varias veces detenido. Sintió que pasaron a llevar su dignidad y honorabilidad. Ni siquiera fue notificado de la sentencia de la Corte Suprema. Se enteró el lunes por la prensa y despertó al otro día con la PDI prácticamente en su dormitorio.

Hernán Chacón Soto prestó servicio a la patria toda su vida, teniendo siempre como principios el amor a Dios, a la patria y a la familia.

Alicia Chacón González