Señor Director:

Hay pocos diagnósticos más ampliamente compartidos: Chile necesita modificar las reglas del sistema político, de tal forma de atacar el serio y creciente problema de fragmentación partidaria. Muchos partidos de nicho, con escasa representación, no solo hacen casi imposible la búsqueda de acuerdos, sino que también permiten la existencia de parlamentarios cuyo “negocio” político es extremar posturas, lo que les permite dar en el gusto a grupos muy pequeños y al mismo tiempo asegurar sus escaños.

No existen en materia de sistemas políticos y electorales soluciones perfectas, pero sin duda la mezcla que tenemos actualmente, de un sistema presidencial, combinado con un esquema proporcional sin corrección para el Poder Legislativo, no está funcionando.

Con este diagnóstico claro, la Comisión Experta ha planteado la exigencia de que, para lograr representación parlamentaria, los partidos deben obtener al menos un 5% de los votos. No parece una exigencia extrema, pero varios de los partidos con representación actualmente no cumplen el criterio, con lo que ya han logrado que se baje en forma transitoria a 4%. Todavía no les gusta a los incumbentes, por lo que siguen presionando al Gobierno para que este, a su vez, plantee alternativas a la Comisión que conviertan la exigencia en letra muerta. Porque la idea de poder constituir “federaciones” nos dejaría finalmente en la misma situación en que nos encontramos actualmente.

Partidos fuertes y representativos es una de las condiciones necesarias para ir resolviendo la crisis política que nuestro país arrastra hace años. Es de esperar que estas presiones de los partidos con riesgo de desaparecer no hagan mella en los expertos, y que los recién elegidos consejeros constitucionales hagan oídos sordos a los incumbentes.

Ma. Irene Chadwick
Cecilia Cifuentes
Michelle Labbé
María Paz Lagos
Claudia Lillo
Karin Moore
Isabel Plá
Corporación SOMOS Mujeres por Chile