Señor Director: En nota publicada ayer, directores(as) de Codelco dan cuenta de que la corporación se ha apegado a los correctos principios de gobernanza, en este caso, en referencia a su posible participación en la explotación del litio. Al pasar, sin embargo, aluden a ciertos aspectos que ameritan aclaración de cara a los accionistas de Codelco —todos los chilenos—, a saber: 1. Aluden a “la estrategia nacional del litio” y de lo que esta se ha seguido. Al respecto, se encuentran públicamente disponibles solo dos referencias a tal estrategia: a) un “Power Point” del Ministerio de Minería de 24 páginas, donde solo una de ellas hace referencia a los objetivos, y b) un “relato” de cuatro páginas que puede ubicarse en la página de la Presidencia. Interesaría a los accionistas saber si los directores(as) han tenido conocimiento, en tan importante materia, de algo más que una página de un Power Point y cuatro hojas de un “relato”, cuando se refieren a la “estrategia nacional del litio”. 2. Señalan —correctamente— que acortar la brecha mundial en la oferta de litio ayudaría a elevar la demanda de cobre, beneficiando a Codelco. Pero, atendiendo el interés general de los accionistas, eso no justifica que deba ser Codelco el llamado a “entrar al negocio de este mineral”, acortando la brecha; tal decisión debiese compararse con la alternativa de celebración de contratos con el sector privado —que también acortaría la brecha—, acaso corriendo menos riesgos. 3. Plantean que entrar al negocio (del litio) “le permitirá a Codelco diversificar los riesgos”; pero dicha conclusión se seguiría si litio y cobre fuesen sustitutos en la demanda, no complementarios, como los mismos directores reconocen.

Los chilenos, accionistas de Codelco, estamos expuestos, por múltiples vías —no solo la fiscal—, a ingresos altamente correlacionados con el precio del cobre y, en lo que sigue, acaso, también estaremos altamente expuestos al litio, máxime si Codelco entra al negocio. Una efectiva diversificación para los accionistas solo podría lograrse vendiendo Codelco y los futuros flujos que se pudieran obtener del litio, usando el producto de dicha venta para adquirir un portafolio diversificado en inversiones mundiales. Pero esta no es una decisión que concierna a los directores de la corporación, sino a sus dueños, todos los chilenos.

Se ha escuchado a los directores; se echa de menos la voz de los accionistas.

Jorge Quiroz