Señor Director:

En su entrevista de ayer, la directora del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Consuelo Contreras, se muestra muy preocupada por el proyecto Nain-Retamal, debido a que las policías en su actuar tendrían una legítima defensa privilegiada afectándose, según ella, la igualdad ante la ley. Sin entrar en el fondo de la iniciativa legislativa, quisiera sí alertar sobre algunos aspectos a considerar por el INDH.

El proyecto hace alusión a Eugenio Nain, Carabinero de origen mapuche asesinado en el contexto de un procedimiento policial en Metrenco (La Araucanía) el año 2020 por la orgánica radicalizada y terrorista Weichan Auka Mapu. El año pasado, de las 14 personas asesinadas en la macrozona sur, la mitad corresponde a personas mapuches. Entre 2014 y 2022 se produjeron 7.067 hechos de violencia donde se atentó no solo contra la vida e integridad física de muchas familias, sino que las orgánicas quemaron escuelas, incendiaron iglesias y destruyeron las fuentes laborales de miles de personas. Los “Yanaconas” —así tildados por las orgánicas—, son personas mapuches que no escogen la vía violenta de las orgánicas radicalizadas y terroristas de la zona y que están permanentemente bajo la amenaza del terror, por el solo hecho de pensar distinto.

Derechos humanos a la vida; integridad física y psíquica; libertad religiosa; derecho a la educación; derecho de propiedad; libertad de expresión, entre muchos otros, son vulnerados diariamente por orgánicas radicalizadas y terroristas que han utilizado la violencia como método de acción política.

No existe otra parte de Chile donde se afecten tantos derechos humanos, de modo tan evidente y durante tanto tiempo. Lamentablemente la preocupación del INDH brilla por su ausencia. En simple, no es tema para el organismo supuestamente encargado por ley de velar por el respeto, protección y promoción de los derechos humanos. El INDH ha normalizado las violaciones a los derechos humanos en la macrozona sur.

Así las cosas, sería extremadamente deseable que la preocupación por el proyecto Nain-Retamal se extienda también hacia las familias mapuches y no mapuches de la macrozona sur, cuyos derechos humanos, no existe duda, son vulnerados diariamente.

Pablo Urquízar M.
Excoordinador nacional de seguridad de la macrozona sur