Cerca de 4.600 niños, niñas y adolescentes se encuentran ingresados en los hogares y residencias de la red de protección del Estado y de organismos privados, que colaboran en esta tarea. Sumados, a fines del año pasado, llegaban a 289 establecimientos a nivel nacional.

Los magistrados y equipos técnicos de los distintos juzgados de Familia del país visitaron el 95% de ellos (274), durante el segundo semestre de 2022, y entregaron un informe a la Corte Suprema con sus principales observaciones.

Por ejemplo, que existe una sobrepoblación o capacidad completa en el 40% de los hogares y que entre los niños hay una violencia “generalizada”, que se ha “normalizado”. También se menciona que los menores “en completo abandono” —consideradas todas las residencias visitadas— superan los 500.

Algunos de estos temas persisten, ya que estos informes se hacen trimestralmente desde 2016; otros aparecen como nuevos, dado que responden a fenómenos relativamente recientes, como la inmigración.

El máximo tribunal hizo público esta semana el documento, elaborado por la Unidad de Seguimiento del Acta 37-2014, que preside el supremo Diego Simpértigue, y los antecedentes, además, fueron enviados al Ministerio de Justicia para su conocimiento y la eventual adopción de medidas.

1Sobrepoblación o capacidad completa en más del 40% de los centros estatales. “Se registra en las observaciones que cerca del 27% de las residencias con administración del Estado se encuentran sobrepobladas”, indica el informe del Poder Judicial.

Y, en ese sentido, advierte que “si a esta cifra se le suma aquella que dice relación con las residencias que se encuentran con la capacidad total ocupada, el porcentaje se aproxima al 43%, lo que da cuenta de la crítica situación en la que se está atendiendo a un número significativo de NNA (niños, niñas y adolescentes) y de las posibles consecuencias a las que se ven expuestos, en términos físicos y emocionales, producto de la convivencia en hacinamiento”.

2 Falta de personal para educación de los niños y adolescentes. El mismo reporte de los jueces de Familia también menciona que “una vez más se identifica la imperiosa necesidad de contar con profesores y educadores diferenciales, que nivelen y acompañen los procesos de aprendizajes sostenidos de manera irregular y poco afianzados por los NNA en el período de confinamiento”.

A ello se suma que en los hogares existe un “escaso equipamiento tecnológico” o este se encuentra deteriorado. Esta situación, dice el documento, ocurre en “la mayoría de las residencias, (...) resulta transversal al país”.

3Más de 500 niños en total abandono en residencias, incluidos extranjeros. Otro de los datos que arroja el informe del Poder Judicial es que“del análisis de las fichas de visitas a residencias ingresadas en el sistema informático de tramitación, se obtiene que, en promedio, en las residencias existen 513 NNA que se encuentran en completo abandono, sin un adulto de la familia nuclear o extensa que tenga presencia en su vida y pueda generar vinculación, para lograr egreso”.

“El factor de completo abandono también puede ser observado en relación a los NNA migrantes, no acompañados o separados, con medidas de protección vigentes e ingresados a residencias”, puntualiza el estudio. A diciembre del año pasado, se contabilizaban 41 en la red.

4Violencia entre pares generalizada. “Una conclusión general —agrega el texto— obtenida del análisis de los registros de visitas da cuenta que muchos de los NNA ingresados a residencias son expuestos física, psicológica y emocionalmente a una victimización y nuevos focos de vulneración, advirtiéndose la ausencia de planes de intervención que apunten a un trabajo focal dirigido a esta temática de manera individual y colectiva”.

“La violencia en todas sus formas, entre pares, se ha generalizado y de alguna manera se entiende como normal, cuestión que es necesaria trabajar con los equipos para mejorar la calidad de vida de los residentes y erradicar el maltrato en todas sus formas al interior de las residencias”, indica el reporte.

5Cerca de 250 niños se encuentran con orden de búsqueda. “Se ha constatado el registro de la situación que experimentan algunos centros a lo largo del país en atención a los abandonos del sistema que efectúan los niños, niñas y adolescente derivados por medidas de protección. Al mes de diciembre de 2022, se contabilizan 250 NNA aproximadamente con orden de búsqueda y recogimiento decretadas por algún juzgado con competencia en familia del territorio nacional”, consigna el informe.

Y, al respecto, añade: “Las observaciones efectuadas en las visitas dejan constancia de la preocupación que existe ante la facilidad con la que hacen abandono de las dependencias, exponiéndose constantemente a prostitución y policonsumo” de estimulantes.

6Insuficientes residencias especializadas y falta de profesionales. “De manera recurrente en las observaciones a nivel nacional, (se refiere) la ausencia de oferta que cumpla con el requisito de residencia de alta especialización (RAE)”, advierte el documento elaborado por los magistrados de Familia.

También que “el sistema proteccional nacional no cuenta con el suficiente recurso humano especializado, que atienda a los NNA que hoy se encuentran ingresados en residencias”.

7Atención psiquiátrica sigue con baja disponibilidad de especialistas y horas en red pública de salud. “Una vez más se da cuenta que algunos hogares de protección cuentan con atención psiquiátrica a través de convenios especiales con privados o la red de salud pública que asegura ciertas horas mensualmente. Sin embargo, varios registros aportan información de que en algunos sectores del país falta personal técnico y profesional o resulta insuficiente la cantidad de horas asignadas a ellos, incluso se consigna que muchas de las instituciones prescinden de esta atención por su costo, con la consecuencia que significa la espera en el sector público, de asignación de una hora de atención en salud mental”.

Mejoras respecto de períodos anteriores

Ahora, no todos los aspectos revisados por los jueces son problemáticos y se registran algunos avances. Por ejemplo, en materia de infraestructura, el reporte arroja que “este semestre (el último de 2022) se ha caracterizado la información por indicar que algunas residencias se encuentran en inmuebles nuevos, o están en busca de otras dependencias donde reubicarse”.

Mientras que respecto de una recomendación que se hizo en visitas anteriores, relativa a la implementación de cámaras de seguridad perimetrales, pudo constarse que en algunos centros ya estaban instaladas. “Las residencias han implementado este sistema de seguridad advirtiendo que el entorno en el que se emplaza el inmueble exhibe peligros como comercio de drogas y sexual al que quedan expuestos todos los residentes”, dice el documento.

Otro punto que “se advierte mejorado —señala el texto— dice relación con el cuidado y orden en el almacenaje de los alimentos. En este período no hay observaciones significativas que digan relación con el encuentro de alimentos en mal estado o descomposición”.