El inicio del nuevo año escolar ha vuelto a exponer la alta saturación en algunos establecimientos educacionales en la macrozona norte, con escuelas y liceos que registran alumnos por sobre el límite de los recintos o sin capacidad de matrículas en algunos niveles.

Un panorama que ocurre en medio de la falta de nueva infraestructura ante el creciente aumento de población en regiones nortinas, potenciado por el incremento sostenido de familias migrantes, según reconocen autoridades de la zona. “En este momento no tenemos vacantes para primero medio. Se le comunicó al seremi (de Educación) y hoy estamos en un análisis de dónde podemos poner a más estudiantes”, dijo María Luz Gálvez, directora de Educación de la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Antofagasta.

De acuerdo a datos del Ministerio de Educación, en 2022 se registraban en el país 116.142 alumnos de nacionalidad extranjera y otros 124.444 escolares migrantes con Identificador Provisorio de Estudiante (IPE), por carecer aún del Rol Único Nacional (RUN). El mayor porcentaje de alumnos con registro IPE lo encabezaban las regiones de Tarapacá (10,0%), Antofagasta (7,8%) y Arica y Parinacota (6,7%).

En la Región de Antofagasta se ha reconocido que el municipio de Mejillones enfrenta una situación compleja, debido al sostenido aumento de población extranjera. El alcalde Marcelino Carvajal (PPD) indicó que en el campamento Villa Internacional, conformado en su mayoría por familias migrantes, habita casi un 50% de la población de la ciudad (18 mil habitantes, según proyecciones municipales). “No somos xenofóbicos, pero los chilenos estamos quedando arrinconados. En educación, en Mejillones hay 600 sobrecupos de alumnos sin subvención, donde el Estado nunca ha pagado un peso. Hemos hablado con todo el mundo y nos han dicho cientos de argumentos para no pagar esos cupos (...) La educación es un derecho porque la Constitución lo dice. Tenemos la esperanza de que nos solucionarán el problema”, sostuvo.

Para la alcaldesa de Sierra Gorda, Deborah Paredes (independiente), presidenta de la Asociación de Municipalidades del Norte de Chile (Amunochi), la sobredemanda de la población migrante en los establecimientos educacionales municipales de las comunas del norte no es novedad. “Esto se viene experimentando desde hace al menos cinco años, pero en el último tiempo ha experimentado un evidente aumento, con cifras que se duplican o triplican, principalmente en las comunas donde habitan más migrantes y se evidencian más campamentos, como en los casos de Antofagasta, Iquique, Alto Hospicio, Calama o Mejillones. La situación es compleja para los municipios, porque son estos quienes deben hacerse cargo de los estudiantes, ya que se trata de sobrecupos sin subvención, donde el Estado no se hace cargo”, dijo.

“El dilema del colapso de las matrículas es otra dimensión de la crisis migratoria que afecta al norte de Chile”, agregó la también alcaldesa de la comuna de Sierra Gorda, en la Región de Antofagasta.

Según registros del Ministerio de Educación, en 2022, Iquique y Alto Hospicio, en la Región de Tarapacá, y Calama y Antofagasta, en la Región de Antofagasta, fueron las comunas con niveles más saturados por demanda de matrículas. En Alto Hospicio, su alcalde Patricio Ferreira (DC) afirmó que se trabaja para abordar esta demanda. “El déficit de matrícula que hemos tenido en la comuna, por el explosivo aumento de la población, lo estamos abordando con tres importantes proyectos que estamos trabajando con el Ministerio de Educación. El primero fue el arriendo de un colegio que se encontraba cerrado, el anexo Simón Bolívar”.

Colegio modular

“Adicionalmente se trabaja en medidas a más largo plazo, como la instalación de un colegio modular con una capacidad para más de mil alumnos y que deberá estar operativo ya en enero del próximo año”, añadió.

La seremi (s) de Educación de Tarapacá, Liliana Valenzuela, sostuvo que “estamos abordando, como prioridad, la tarea de habilitar más cupos en matrículas para aumentar la cobertura escolar en las comunas de Tarapacá. Durante el año pasado, en el contexto del Plan de Fortalecimiento de la Matrícula impulsado por el Ministerio de Educación, habilitamos el espacio educativo que es el anexo del Colegio Simón Bolívar de Alto Hospicio, que hoy atiende a más de 600 estudiantes desde primero a quinto año básico”.