El Mercurio.com - Blogs : ¿La ideología o los resultados?
Editorial
Sábado 04 de marzo de 2023
¿La ideología o los resultados?
"Siempre habrá aquellos dispuestos a sacrificar los resultados con tal de mantener la pureza doctrinaria o ideológica".
Toda agrupación política debe sufrir las tensiones que ocurren entre quienes buscan pragmáticamente obtener resultados tangibles y quienes desean impulsar sus propias ideas, así sea que ellas se estanquen sin buenas consecuencias. Las razones de esta divergencia pueden ser muy variadas, pero siempre habrá aquellos dispuestos a sacrificar los resultados con tal de mantener la pureza doctrinaria o ideológica y no faltarán los que estén preocupados de la evolución del país y la evaluación que a diario reciben de parte de la gente.
La jefa del Gabinete ha hecho presente la necesidad “de adaptar el plan de gobierno a la realidad social cambiante y difícil de descifrar”, según lo expresó a este diario. Al respecto, ha subrayado la rapidez que ella aprecia en este gobierno por “ajustar su promesa a la realidad”. Sería imposible para cualquier gobierno insistir en los puntos de vista que desarrolló durante su campaña electoral si se producen cambios materiales o sociales de cierta envergadura. El terremoto de febrero de 2010, por ejemplo, ocasionó un cambio violento en la realidad material del país que no podría haber sido obviado por atender a un programa elaborado antes del sismo. El resultado del plebiscito del 4 de septiembre recién pasado que, con una participación récord, rechazó la propuesta constitucional que había impulsado el Gobierno es otro ejemplo de un hecho de trascendencia que obliga a revisar y ajustar muchas promesas hechas antes de que se conociera esta disposición de ánimo del país.
Pese a lo anterior, la ministra secretaria general de Gobierno ha señalado la idea de perseverar “con una renovación y un reforzamiento de los compromisos”. No da señal alguna de cambios en los planteamientos del Gobierno, pese a los numerosos giros radicales que se han observado en toda clase de materias, que han contradicho las promesas hechas durante la campaña. Desde la expresa oposición al TPP11, ahora celebrado, hasta los estados de emergencia en la macrozona sur, antes rechazados en cada votación y ahora propuestos por el mismo gobierno, pasando por el rechazo a los retiros de los fondos de las AFP, hasta ayer impulsados por las mismas fuerzas políticas que ahora desde el gobierno procuran impedirlos, son muchos los cambios que el país comprueba día a día y que, en general, más los celebra que los condena.
El planteamiento de la vocera no parece del todo concordante con la lógica de las consideraciones de la ministra Tohá. Si bien la ministra Vallejo no puede aceptar que el Gobierno renuncie a su programa, debería inclinarse más por la adaptación a la realidad cambiante que por una insistencia algo rígida en reforzar sus compromisos. Con ello, por lo demás, estaría reconociendo, y no negando implícitamente, los múltiples cambios de opinión que han tenido, desde el Presidente de la República hasta sus propios parlamentarios.
Se ha dicho una y otra vez que el Gobierno, que es respaldado por dos coaliciones distintas, tiene, por tanto, dos almas y es posible que en estas distintas versiones que se han conocido respecto de los ajustes de las promesas a la realidad o del reforzamiento de los compromisos, nuevamente se estén manifestando las dos voluntades que sostienen al Gobierno. Si bien existen estas dos vertientes, que intentan convivir de la mejor forma posible, no ha sido la coalición de Apruebo Dignidad la que más ha ayudado a mejorar los resultados. El desenlace de la Convención Constitucional en septiembre ha logrado mejorar el ánimo de muchos chilenos, lo que ha contribuido a cierta mejoría en la actividad económica, como parece demostrarlo el reciente Imacec, pero en la medida que se insista con porfía en mantener los mismos objetivos que fueron derrotados en septiembre, se podrían volver a cerrar las expectativas más favorables.