Las casas de apuestas online, Coolbet, Betway o Betano, son especialmente cuidadosas con los menores de edad.

Eso dicen y así está escrito.

La mayoría de edad no es la misma en cada país, pero más allá del número, están los principios y convicciones: los menores de edad no pueden ni deben participar en este tipo de juegos.

Betano, por ejemplo, que auspicia a Universidad de Chile, en su página web advierte que si sospechan o descubren a un menor de edad en su interior, lo reportarán inmediatamente a la policía. Más allá de si está apostando o poniendo fichitas, incluso intruseando y mirando, da lo mismo, igual le cae la denuncia y el peso de la ley al menor irresponsable e infractor.

Betway, que pone su dinero en las camisetas de Coquimbo Unido, Everton y Unión La Calera, entre otros equipos, ofrece la autoevaluación Prueba de Diagnóstico para Trastornos del Juego, porque son conscientes de la ludopatía, la mala enseñanza y la enfermedad. Por eso su estructura digital y amigable página web se mantienen atentas y vigilantes, ya que está tajantemente prohibido la membresía, el ingreso o las visitas de menores de edad a sus páginas.

Coolbet, que se puso con Colo Colo, tiene su sede en Casa Regent, oficina 21, calle Bisazza, Malta, y la casa de apuestas, tanto allá como acá, quiere evitar que aparezcan los menores en su sitio, y para eso les da herramientas a las familias y a los mayores de edad: NetNanny, Cyberpatrol o Contentwatch.

Una vez dicho lo anterior, bueno sería saber cómo se hará con las camisetas de los equipos, con esas camisetas que lucen el logo de las casas de apuestas, con el fin de visibilizar su rubro, publicitar su giro y promover su práctica.

¿En quiénes estamos pensando?

En los mismos que tienen en mente Betano, Betway, Coolbet y otros: en los menores de edad.

En esos chilenos y chilenas, entre cero y 18 años, con la camiseta oficial de su equipo preferido. Fue de regalo o con plata ahorrada. Y fue la nueva, la novedosa, la del 2023. En lo posible, la químicamente pura, la original, pero si el año viene recesivo y no hay alternativa alguna, entonces la alternativa.

¿Puede un infante de Chorrillos alto o bajo, digamos un niño de 9 años, un pequeño guata amarilla de Everton, ocultar lo que lleva grabado en su pecho de menor de edad: Betway, casa de apuestas online?

¿Cómo puede un adolescente romántico de Universidad de Chile, vestido con la camiseta 2023, renunciar a lo evidente: soy un cartel humano de Betano?

Ahí está la de Colo Colo, seguro la más pedida y vendida, donde si es blanca de negro dice Coolbet, con letras visibles. Y si es oscura o ploma, entonces será con letras blancas, la cosa es que todo el mundo lo vea, y los niños y jóvenes lo pasean: Coolbet. Juego online.

Chilenitos que lucen los nombres de las empresas y su giro.

Niños colocolinos que les hacen publicidad a los juegos de azar.

Jóvenes de la “U” que promueven las apuestas online.

Menores de edad con la camiseta puesta.

Eso que les preocupa tanto.