Jordan Peele (1979) filma de una manera muy pulcra, dinámica y atractiva, de una forma que casi podría calificarse como hipnótica, no muy distinto quizá de como lo hizo Kubrick desde 2001 (1968) en adelante, con quien tiene más de un punto en común. Para ambos, la forma es tanto o más relevante que el qué, punto de donde nacen también sus respectivas debilidades.
Con apenas tres largometrajes, Peele, un excomediante, ha ganado un enorme prestigio. Ello se debe en parte a que sus dos primeros trabajos —¡Huye! (2017) y Us (2019)— mezclaban el horror con el comentario social de manera astuta y algo malvada. La primera era derechamente una fábula sobre el racismo; la segunda, sobre la lucha de clases. Sin embargo, ambas eran también películas de horror que funcionan en sí mismas, con tramas y atmósferas —ominosas— especialmente elaboradas.
En cines, se acaba de estrenar Nop!, que quizá tiene más deuda con el género de la invasión extraterrestre. La cinta se centra en OJ Haywood (Daniel Kaluuya), un taciturno entrenador de caballos en Agua Dulce, California, que ve como su padre, fundador del rancho, muere a raíz de una extraña lluvia de monedas y llaves que caen a gran velocidad del cielo una mañana cualquiera de la semana. El cielo, entonces, comienza a ser objeto de atención de OJ, porque algo parece esconderse detrás de una extraña nube. Su hermana, Emerald (Keke Palmer), apenas se da cuenta de que hay un ovni en juego, lo convence para que lo filmen e, imágenes mediante, se hagan millonarios. Pero el asunto se va complicando, obviamente.
En un plano, Nop! aborda la idea de que todo espectáculo, show (o película) tiene un montaje detrás, una puesta en escena que se suele esconder. La elusividad del mentado ovni, de hecho, termina forzando a que OJ y compañía terminen levantando una verdadera puesta en escena para “capturarlo”. Toda esa línea de la cinta está bien, pero no dice mucho más de lo que otras películas han dicho, con más profundidad probablemente, como, sin ir más lejos, la reciente Érase una vez en Hollywood (2019).
En otro plano, Nop! entra en la domesticación de animales y apunta a que la naturaleza es, en última instancia, indomesticable. La cinta contiene una historia paralela sobre un chimpancé que se rebela violentamente contra sus compañeros humanos en un set de televisión, marcando para siempre la vida de Jupe (Steven Yeun), que era por entonces un actor niño y se salvó providencialmente de la masacre. Este chimpancé, por lo pronto, recuerda al del comienzo de 2001. Para Kubrick, nunca dejamos de guardar como humanos parte de esa violencia animal. Para Peele, no es tan evidente. Sus protagonistas, como OJ, suelen ser estructuralmente pacíficos (y mejores personas que el habitante habitual de Kubrick).
Sí le interesa a Peele la idea de la doble naturaleza, de lo que se esconde detrás de la apariencia, lo que quizá anuda los dos planos anteriores: el show y la reserva salvaje de todo animal. En Huye, los Armitage tenían un doble fondo: familia blanca, progre, sin embargo, robaba la juventud de los novios afroamericanos de su hija. En Us, los dobles torcidos de la familia Wilson invadían literalmente su casa. Aquí, OJ no es el tonto que parece en un principio; tampoco lo es su hermana. Jupe ha montado un parque de atracciones tipo far west, vecino al rancho de los Haywood, pero desde su oficina tiene un acceso secreto a la sala de memorabilia del show de su infancia, casi como una entrada a su inconsciente. Cada cosa termina siendo otra. Ni siquiera el ovni es una nave espacial.
Ahora, ¿hace algo realmente interesante Peele con todo esto? No demasiado. Nop! es un buen espectáculo: una cinta que captura la atención, que intriga y mantiene al espectador bien tomado de la mano. Pero no parece hacer mucho con su material. Como que dispara en muchos sentidos a la vez y a la vez en ninguno. Sobre su pulcritud y virtuosidad cinematográfica no se levantan observaciones finas ni reveladoras sobre el ser humano. Tampoco sobre el mismo cine. Nop! se ve, se siente, mejor de lo que en verdad es.
Nop!
Dirigida por Jordan Peele.
Con Daniel Kaluuya, Keke Palmer y Brandon Perea.
Estados Unidos, Japón y Corea, 2022
130 minutos.
En cines.