Señor Director:

Ha transcurrido más de una década desde la creación de los Liceos Bicentenario, una de las políticas públicas más pioneras e innovadoras en materia de educación escolar. Los buenos resultados en las pruebas Simce y de ingreso a la educación superior de estos establecimientos —que hoy suman 320 en las 16 regiones del país—, junto con una sana convivencia escolar, se han traducido en una marcada preferencia de las familias por ellos. En efecto, de acuerdo con los datos del Ministerio de Educación, en el proceso de postulación del Sistema de Admisión Escolar (SAE) 2021, los Liceos Bicentenario tuvieron en promedio 3,5 veces más preferencia que el resto de los establecimientos educacionales, lo que revela que los apoderados los prefieren por sobre otras instituciones del sistema educativo.

¿Por qué las familias eligen Liceos Bicentenario? Una encuesta del Mineduc realizada a padres y apoderados de estos establecimientos señaló que los factores más relevantes fueron “el prestigio del establecimiento”, con un 94%, seguido por “la convivencia escolar” (91%), “la calidad de los docentes” y “los valores del Proyecto Educativo”, ambas variables con un 90%. Además, ven reflejados los pilares Bicentenario en estas comunidades escolares con altas expectativas de sus estudiantes, foco en los aprendizajes y autonomía para desarrollar su labor.

Por lo anterior, resulta lamentable e inexplicable que el Ministerio de Educación haya resuelto no seguir apoyando esta exitosa política educacional, que beneficia a más de 250 mil estudiantes de alta vulnerabilidad y que ha probado ser una política efectiva en términos de mejora de la calidad de la educación. Para que los Liceos Bicentenario continúen siendo una alternativa de excelencia académica al alcance de todas las familias chilenas, necesitan seguir contando con la coordinación y el apoyo decidido del Ministerio de Educación.

Camila Romero Morandé
Profesora
Excoordinadora nacional Liceos Bicentenario