Uno de los problemas del adulto mayor, es el caso, es la poca destreza digital en el universo de las páginas web, portales y demás ingenios.
Quise investigar, sin embargo, el caso de los representantes. Encendí el computador e ingresé a la página de la ANFP, y dejo el mapa, para hacerlo fácil: “Torneos y Competencias”, “Bases de Campeonatos” y entonces “Registro de Intermediarios”, todo un cuerpo legal aprobado por el Consejo de Presidentes el 31 de enero del 2018, en una sesión extraordinaria. Faltaría más.
Para la ANFP no existen los representantes, pero sí los intermediarios: “Persona natural o jurídica que, a título oneroso o gratuito, actúa como representante de jugadores, aficionados o profesionales, directores técnicos y/o clubes de fútbol profesional, con el objetivo de negociar un contrato de trabajo o sus modificaciones, o como representante de esos clubes en negociaciones para celebrar un contrato de traspaso”.
En el apartado Registro de Intermediarios figuran 4 formularios con los requisitos, porque hay que postular con documentos legales, dos fotos tamaño pasaporte, informes comerciales y además pagar 15 UF. Se les toman exámenes específicos y si se les aprueba, pasan a integrar el Registro de Intermediarios que lleva la Secretaría Ejecutiva de la ANFP.
Aparte de esos 4 formularios, en el apartado aparecen 9 documentos, donde resalta el Anexo III Código Deontológico, es decir, normas éticas y de conducta que debe exhibir un intermediario, conocido como representante, en el mundo popular.
Entre otras virtudes:
Ceñirse a la verdad, claridad y objetividad.
Controlar los libros en forma concienzuda.
Llevar facturas de honorarios, incluidos los gastos.
Mantener un mínimo de contabilidad sobre su actividad.
Como hay tanto desconfiado, aclaro de inmediato: lo del “mínimo” es textual, al igual que los otros requisitos.
Vamos a lo que importa: el Registro de Intermediarios propiamente tal, es decir la lista de las personas naturales o jurídicas (con todos los integrantes) que ejercen como representantes en Chile. Es deber de la Secretaría Ejecutiva de la ANFP, así está establecido, hacerlo público y tenerlo a mano. Lamentablemente, y de seguro que por la deficiencia señalada al comienzo, no logré dar con esa lista.
Otra manera de llegar, pensé, sería revisar el “Informe anual consolidado de pagos a intermediarios”, que también es público. Ahí están los nombres y las platas obtenidas por cada uno, pero logré dar con el de marzo del 2019, pero no con los informes del 2020, 2021 y 2022, debido a mi escasa pericia digital.
El único documento, entonces, el de marzo del 2019, revela los pagos que recibieron los intermediarios por sus operaciones entre el 1/4/2018 y el 31/3/2019. La cifra es reveladora y cautivadora: “No se han notificado pagos en operaciones de intermediario”.
Así que apagué y me fui.