Señor Director:

Da la impresión que la mayoría de los integrantes de la Convención Constitucional, y de los militantes, adherentes y simpatizantes de las organizaciones que los respaldan, creen que no existe la menor posibilidad de que la opción Rechazo sea la escogida en el plebiscito ratificatorio de la propuesta de Constitución Política, sin importar cuál sea el contenido de la misma.

Yo sería mucho más cauteloso. Es más, contemplaría ingresar, al más breve plazo, un proyecto de reforma constitucional que disponga el reinicio del proceso constituyente si se verifica la hipótesis que señalo, convocándose a una nueva elección de convencionales, bajo condiciones normativas distintas, a quienes se otorgue un plazo más extenso de trabajo, considerando la naturaleza y la relevancia del mandato.

De esta manera, no se sometería al pueblo a la injusticia de tener que optar entre, por un lado, aprobar una propuesta que pueda percibir como desprolija o poco razonable; o por otro, mantener la vigencia de la actual norma fundamental, originada por y durante la dictadura del general Pinochet: precisamente aquello contra lo que se produjeron las mayores protestas sociales de las cuales Chile tenga memoria.

El tiempo apremia.

Juan Pablo Pinto Montero
Abogado, militante PS