Señor Director:

Actualmente es posible diagnosticar a las pocas semanas de gestación diversos problemas que pueden presentar los niños al nacer. La mayoría de esas enfermedades son compatibles con la vida. El proyecto en trámite en la Convención permite que muchos de esos niños no nazcan. Conozco la realidad de sociedades donde se puede hacer esto, y sé que es así.

Tengo una hija con síndrome de Down, Antonia. Creo que si hubiese sabido de su condición cuando ella tenía 11 semanas de gestación, honestamente me hubiera preguntado si interrumpir o no mi embarazo. Imposible saber ahora qué hubiese hecho… pero de haber abortado, me habría restado de ser su madre, y ser su madre ha sido una de las tareas más hermosas que he emprendido.

Ojalá contemos con leyes que permitan conocer en profundidad todo lo que las personas con discapacidad pueden aportar en nuestra sociedad, para que no les impidamos nacer.

Paula León Stehr