Khala: Tá, tá.

Izkia: ¿Qué me dice mi linda, qué me quiere decir?

Khala: Tá, tá.

Camila: ¿Tendrá hambre?

Izkia: No, no puede ser.

Camila: Dice Tata, eso dice.

Toti: Quiere ver a su Tata.

Adela: Está mirando a ese viejo.

Camila: Baje la voz, mijita. No la vayan a escuchar.

Adela: Mamá, míralo bien, seguro que es medio sordo.

Toti: Tiene razón tu hija.

Adela: Gracias, puedes decirme Adela.

Toti: Me llamo Antonia Orellana, soy la ministra de la Mujer.

Adela: Perdona, el cargo es de la Mujer y de la Equidad de Género.

Toti: Tienes toda la razón.

Adela: Te voy a decir Toti.

Khala: Tá, tá.

Izkia: ¿A quién quiere ver, mi linda?

Khala: Tá, tá.

Camila: ¿A quién está mirando ahora?

Toti: A don Carlos Montes.

Adela: ¿Cómo qué don Carlos?

Camila: Adela, compórtate, deja de corregir a la gente.

Adela: Mamá, quiero ir al Reloj de Flores.

Camila: Otro día, hoy no.

Izkia: Me encantó el lugar. ¿Hasta cuándo nos quedamos?

Toti: Cuatro años, al menos.

Giorgio: Tati, te escuché.

Toti: Toti, no Tati.

Giorgio: Perdona Antonia, igual desde la próxima semana, en el comité político, nos vamos a ver y conocer mejor. Nos esperan cuatro años, efectivamente, pero quería dejarles una idea: lo inesperado será lo frecuente. Gobernar es procesar de manera correcta lo imprevisto e incorporarlo a un cuerpo metodológico. Eso esperamos de ti y de todas.

Adela: Se dice todes.

Giorgio: No descarto incorporar ese mecanicismo en la toma de decisiones y en la mecánica de las estructuras comparables. En fin. Desde el lunes nos reunimos. Pero les dejo estos algoritmos de buena gobernanza. Voy a recorrer el jardín. Chao.

Adela: Pelado malo.

Camila: No es malo. Hay que conocerlo.

Izkia: Pero es pelado.

Toti: Es pesado. Lo del comité político me soprepasa, no puedo dormir y ando nerviosa. No entiendo lo del algoritmo.

Izkia: Es que tú eres periodista nomás.

Camila: No te exijas más de la cuenta.

Izkia: Tienes que ayudarte con algo.

Toti: Recomiéndame una serie de Netflix, me gustan de dos tipos: las bien intensas y las bien oscuras.

Camila: Mejor dale un diazepam.

Toti: ¿Sin receta?

Izkia: Tómate medio.

Adela: Quiero ir a la avenida Perú.

Khala: Ta.

Izkia: También quiere ir.

Mario: Hola, qué bonito el lugar. Nunca había estado acá en el palacio del Cerro Castillo. ¿Saben que durante años hubo una gran tortuga? En tiempos de Jorge Alessandri, por los años 60. En el tercer piso está la biblioteca. Voy y vuelvo. Desde la otra semana nos juntamos en el comité político. Nos vemos.

Toti: ¿Era Esteban Valenzuela?

Izkia: No, era Mario Marcel.

Adela: ¿Quién es Esteban Valenzuela?

Camila: No pregunte leseras.

Adela: Quiero ir al casino, mamá.

Khala: Ta.

Izkia: Yo me instalaría con una carpita en el jardín. Te lo prometo. Voy a venir todos los veranos. Una semanita.

Adela: Quiero ir a jugar a las maquinitas.

Khala: Ta.

Izkia: También quiere ir.

Toti: Dame el otro medio.