Las informaciones más relevantes del deporte chileno se produjeron fuera de nuestras fronteras en los últimos días y las encabeza Joaquín Niemann con su espectacular triunfo en California. Un joven de aptitudes notables que “pinta” para grandes conquistas. Son 23 años con madurez para regalar.
Lo de Manuel Pellegrini es notable. Hace demasiados años que viene mostrando su capacidad por canchas del mundo y muchos desde que en esta columna se lo ha destacado como el mejor entrenador chileno histórico. Desde antes, en realidad, de que se le empezaran a reconocer méritos entre parte del púbico y de la crítica. Hoy los elogios vienen desde Sevilla, donde su campaña con el Betis repite conceptos ya ganados en tantos otros lugares.
Lo de Pellegrini es notable porque donde quiera que estuvo “hizo lo que nadie antes hizo”. ¿Cómo lo hace? Porque no parece haber inventado nada, no hay ninguna pizarra revolucionaria que lleve su firma, ningún texto con una nueva fórmula para las matemáticas del fútbol o algún nutrido anecdotario que sirva luego para un libro de bolsillo sobre su “filosofía” del juego. ¿Será por eso por lo que se explica su éxito? Puede ser y lo cierto es que quienes han sido jugadores a su mando lo recuerdan con afecto y respeto. Tal vez es por ingeniero que ha conseguido calcular y construir bien sus planteles.
Ya nadie se sorprende por sus conquistas y hasta Marca, la publicación que hizo de la infamia una consigna editorial para destruirlo cuando llegó al Real Madrid, hoy le reconoce méritos y lo aplaude.
De entrada, en Argentina (¡cómo pasa el tiempo, hace 21 años!) lució su calidad técnica y humana al hacer campaña inigualada con San Lorenzo, llevándolo a campeón y, por primera vez, ganador de una copa internacional: la Mercosur, que ya no existe. Y después River, campeón del Clausura 2003.
Es difícil explicar la resistencia en Chile hacia Manuel Pellegrini. Algunos recuerdan el único descenso histórico de la Universidad de Chile con él en la banca (aunque no la ocupaba en los tres decisivos partidos finales de 1988). Una animadversión azul puede explicarse por ese motivo. Pero en ningún otro club. Si hubiese una encuesta sobre popularidad, seguramente Pellegrini no la ganaría. Es posible que se trate de cuestiones ajenas al fútbol: porque es “pituco”. Eso creo yo. Ya sabemos cómo son y cómo están las cosas.
Casi todos sus pasos en Europa han sido exitosos. Con el Villarreal hizo campañas históricas y las repitió con el Málaga. En Inglaterra ganó la Copa Inglesa con el Manchester City y es el primer entrenador no europeo en ganarla.
La campaña del Betis está en desarrollo, luciéndose en la Liga española, en la Copa del Rey y en la Europa League.
La tercera información que viene del exterior es la integración de Pablo Milad en la lista del actual presidente de la Conmebol como vicepresidente del organismo. Es lista única. Casi simultáneamente la FIFA anuló el castigo contra Chile por los desbordes del partido contra Ecuador y podrá jugar con público con Uruguay. Una excelente coincidencia.