Paz Lira ha reciclado una obra suya de 2003, su resultado se nos muestra en Lo Matta Cultural. Se trata de una instalación a partir de material de desecho proveniente de la industria salmonera. De su deterioro profundo, de las putrefacciones biológicas, de las intervenciones con tierra sufridas por el fieltro alquitranado bajo el imperio del agua, supo extraer la artista una imaginería abstracta de ricos matices. Y les otorgó permanencia mediante ampliaciones fotográficas. Formada por paneles, su variedad de texturas y de colores oscuros, tostados y terrosos impresiona como una especie de mapa o paisaje no figurativo, capaz de irradiar una luz interior que más bien pareciera conducir antes a estados anímicos que a definir rasgos territoriales.
La actual exposición colectiva de Galería Artespacio reúne la producción de 40 artistas nacionales, conocidos o menos conocidos, realizada durante estos meses de encierro. Ella se conjuga muy bien con la exhibición de la Corporación Cultural de Las Condes. Si acá, una vez más, la abstracción y su derivación geométrica hacen valer su vigencia, llama la atención la concurrencia fructífera de autores nuevos. Así, algunos de estos consiguen acaparar el interés del visitante. Comencemos por el muy hermoso aporte de Francisca Garriga. Ya antes deslumbró en la misma galería. También ahora los mondadientes constituyen su intermediario. Construyen estos un intenso panel que, sobre el plano tablero ajedrezado, hace florecer un férreo ritmo visual, dado por enfrentamiento diagonal de azul de Prusia y cerúleo. Al mismo tiempo, los espacios precisos entre los mondadientes aportan natural ligereza a la obra. Lápiz y acrílico sobre papel permiten a Matías Valenzuela un limpio, equilibrado y flotante despliegue en el espacio de horizontales líneas de pigmento. Desprende un indudable aire de paisaje nipón. En la antípoda de los anteriores se sitúan, en cambio, Rodrigo Vargas y Consuelo Walker. El primero entrega la ironía de una agigantada corona fúnebre compuesta por una multitud de triángulos de lino negro y ocre. Walker, entretanto, propone la paradoja de un columpio infantil, tachonado de agujas gruesas aptas para faquir, acaso eco póstumo de Man Ray.
Entre otros dos participantes novedosos hay coincidencias: ambos utilizan acero y cobre, además de ser la geometría su fundamento. Así, Carolina Agliati desarrolla su versión del op art por medio de un impecable panel, en el que el ingrediente rojizo se moviliza visualmente. Mientras tanto, Carlos Vidal hace del cobre diamantes incrustados con justeza dentro de la superficie lisa del soporte. A otro mundo nos conducen Bernardita Bennett con su fina fotografía figurativa, que logra transmitir bien el efecto de lugar, y Josefina Bardi, cuya hilarante secuencia de tres videos para operar plenamente no necesitaba del aparataje acompañante. Por último, recordemos los bordados abstractos de Macarena Venegas, la agresiva mirada de Bárbara Valdovinos que recobra ensamblados del ayer, las pinturas con aspecto delicadamente corchoso de Amelia Valdés.
Respecto a los artistas bien identificados por el público debe destacarse la bella pintura de José Basso. Dentro de su temática habitual obtiene una irradiación vibrante de la luz, desde las inmensidades genuinas de su panorama y desde el recogimiento humano de la casa habitación. Asimismo, se hace admirar la preciosa mesa de madera multicolor de Andrés Vio. En su maqueta del tan oportuno monumento a Magallanes, Francisco Gazitúa obtiene una transfiguración volumétrica airosa y férrea, hondamente evocativa de la hazaña. Carlos Edwards —atrayentes granitos— y Mauricio Guajardo mantienen su nivel acostumbrado, mientras Alfredo Echazarreta otorga dinamismo explosivo a su pintura. Como siempre, María José Mir interesa a través de su propuesta que unifica costura e ingrediente pictórico. Para terminar, el video de Bernardo Oyarzún explora la vinculación rítmica entre olas marinas y un rito ancestral.
Alteridad
Gran instalación mural con materiales de desecho y fotografías, de Paz Lira
Lugar: Casas de Lo Matta
Tiempos fragmentados
Buen muestrario de la actividad de 40 artistas durante la pandemia
Lugar: Galería Artespacio
Fechas: hasta mediados de marzo