CLAUDIO CERDA, ÓSCAR RIQUELME Y ÓSCAR DELBENE

El desgaste laboral en el personal de salud por la alta exigencia asociada a la pandemia, como el impacto en la sanidad mental y el bienestar psicosocial de los equipos, impulsó al Colegio Médico a solicitar un descanso compensatorio para los trabajadores del sector, en consideración a la disminución de casos activos en algunas zonas del país.

La medida forma parte de las propuestas surgidas en la Mesa Social Covid-19 del gremio, en que se solicita flexibilidad con los feriados legales y descanso compensatorio, a fin de postergarlo si el trabajador así lo desea.

Para José Miguel Bernucci, secretario nacional del Colegio Médico, la medida resulta necesaria ante una fuerte sobrecarga laboral que obligó en Santiago y en algunas regiones hasta triplicar turnos en el período más crítico de la pandemia. “Hoy tenemos problemas de índole física y psicológica, síntomas depresivos y ansiosos, y eso podría llevar a un aumento del ausentismo por licencias médicas. Además, una persona sometida a un gran esfuerzo tiene riesgos de burnout”, dijo Bernucci, sobre un diagnóstico referido al agobio mental, emocional y físico causado por la sobrecarga laboral.

“Hay experiencias (en otros países) en que se han otorgado días libres y aumentos de sueldo”, agrega Bernucci, sobre medidas adoptadas en otras naciones. Así, en España, por ejemplo, los “sanitarios” catalanes han solicitado “medidas para compensar los sacrificios profesionales y personales” durante la pandemia, las cuales han incluido compensaciones económicas.

Estas medidas, sin embargo, no podrían implementarse aún en regiones como las de Magallanes y Ñuble, cuyos sistemas están actualmente tensionados por una alta demanda asistencial.

Para Gabriel Cavada, académico del Programa de Epidemiología de la Escuela de Salud Pública de la U. de Chile, de no adoptarse un permiso compensatorio y ocurrir un rebrote, podría “reventar físicamente el sistema de salud”, tras seis meses de pandemia.

Los trabajadores, en tanto, siguen a la expectativa de lo que ocurra luego de Fiestas Patrias.

Frente a esta demanda, el ministro de Salud, Enrique Paris, confirmó ayer en una visita a Valdivia que el tema ha sido discutido con el contralor general de la República para evaluar una fórmula que permita a funcionarios de la salud contar con un descanso compensatorio. “Los estudios que ha hecho la Sochimi con respecto al burnout son verdaderos: tantos meses de pandemia, tanta gente que ha fallecido y que ha perdido seres queridos; y los funcionarios de la salud trabajando en forma intensiva, claro que están agotados y tomaremos en cuenta eso”, explicó Paris.

“Nos hemos reunido con el contralor justamente para ver la posibilidad de buscar una solución en el sentido de que la gente pueda tener este descanso y no pierda las vacaciones, porque, como ustedes saben, no las han tomado. Para eso se requiere una pequeña ley que diga que van a poder tomar las vacaciones el próximo año. Por ejemplo, las que están atrasadas. Estamos preocupados de eso”, agregó.