Antes de que se completen los primeros cinco minutos de esta película, Abel (Louis Garrel) es notificado de cuatro cosas por la mujer con la que vive desde hace tres años, Marianne (Lætitia Casta): está embarazada, el bebé no es de él, en realidad ha sido fecundada por su mejor amigo, Paul, y lo mejor es que se vaya de su departamento lo antes posible. No hay dramatismo aparente en este anuncio: solo gentileza, sonrisa y buena onda. La única nota discordante es que cuando Abel cierra la puerta, se oye un asordinado estruendo en la escalera. Abel se ha dado un porrazo, pero ni siquiera lo vemos. Ese es el tono de
Amante fiel.
Después de “ocho o nueve años”, Paul muere y Abel se enfrenta a una segunda oportunidad con Marianne. Ahora está en el medio Joseph (Joseph Engel), el niño perceptivo y algo manipulador que nació de aquel embarazo. Y además aparece Eve (Lily-Rose Depp), la hermana menor de Paul, que ha estado enamorada desde niña de Abel. Esto forma el triángulo con aspecto de cuadrángulo, porque quien congrega a todos los personajes es el invisible Paul, hasta cierto punto proyectado en el niño Joseph.
A partir de un momento, parece que la trama se fuese a deslizar hacia una intriga policial. Por debajo de la gentileza y la cordialidad de los personajes, parece que todos mienten, que todos ocultan algo y que cada uno es una máscara de algo muy diferente. Una cuota de esa ambigüedad permanece a lo largo de toda la película y es posiblemente lo más interesante.
Louis Garrel comenzó su carrera como actor y en ella ha llegado hasta
Mujercitas, después de tener el honor, enojoso pero divertido, de interpretar a un insufrible Jean-Luc Godard en
Le redoutable. Está casado con Lætitia Casta y es hijo y nieto de cineastas, por lo que el aire de comedia familiar que tiene
Amante fiel no es tan extraño. Comedia amorosa que además es de cámara y de interiores, porque Garrel rara vez deja que su lente muestre algo más que el aire que rodea a los personajes. Todos parecen constreñidos en el espacio, como si sus destinos estuviesen ya determinados (¿por el muerto Paul?): no hay libertad, la ambigüedad deja de importar.
La autoconciencia del cineasta está llevada a un grado estridente. Por ejemplo, cada vez que encuadra al niño Joseph lo hace con una cámara manual, que refleja —¡subraya!— su inestable función dentro de la historia. Los varios narradores que se suceden en el relato son como un eco tardío, acaso un homenaje, de la Nueva Ola de los 60. Se trata de esfuerzos un tanto excesivos, teniendo en cuenta que la comedia amorosa avanza según el patrón de la predeterminación. Es también una explicación para que todo sea tan civilizado, tan comprensivo y tan, tan tolerante.
L'HOMME FIDÈLE
Dirección: Louis Garrel.
Con: Louis Garrel, Lætitia Casta, Lily-Rose Depp, Joseph Engel, Vladislav Galard, Dali Benssalah, Bakary Sangaré, Kiara Carrière.
75 minutos.