En YouTube hay una filmación de origen japonés y con relatos también japoneses, que dura 57 minutos y fracción, en colores y es el reto del chileno Godfrey Stevens, 31 años, al campeón Shozo Saijo, 23, por el título mundial de peso pluma.

Ocurrió hace 50 años, en un día como ayer: 8 de febrero de 1970, cayó domingo y muy temprano TVN, en blanco y negro, y con Sergio Brotfeld en el relato, transmitió la derrota por puntos y en 15 asaltos.

En las imágenes niponas, muy al comienzo, está Stevens con guantes y pantalón rojo y una toalla blanca por el cuello. Es un chileno solo sobre el ring, que canta lo que todos sabemos desde niños: la Canción Nacional. Lo hace claramente y en voz baja, con su nariz chata por tanto golpe y un semblante de hombre pacífico, que si pega es por la profesión que escogió, pero no por su condición natural y espontánea.

En los años 60, entre 13 y 14 Norte, pegado a avenida Libertad, estaba el Coliseo Popular, demolido en los años 70 y construido en torno a 1930, cuando fueron inaugurados el Casino de Viña del Mar y el Teatro Municipal.

En el Coliseo había lucha catchcán y box, y muchos peleadores vivían al lado y en el Regimiento Coraceros. Eran morenos, pelados y pelos duros. En ese lugar, alguna vez y por parlantes con carraspera, anunciaron a un Godfrey Stevens, un campeón invitado con un apellido raro y extranjero en un mundo donde los Soto, Díaz y González eran legión.

Shozo Saijo abandonó el box y por un tiempo se dedicó al kickboxing, con cierto éxito, y se retiró e inauguró un gimnasio. Lo apodaban Cinderella Boy, destacaban su altura, juego de pies y pegada.

Stevens, a mitad de los 80, retiró sus últimos papeles en avenida Bustamante 180, donde está la Parroquia Italiana y el Instituto Católico Chileno de Migración. Se iba de Chile y se fue a Australia, en busca de otros horizontes y mejores horizontes.

Arturo Godoy, en dos ocasiones de 1940, fue por el título de peso pesado y el primer desafío cayó en un viernes de un día como hoy, pero de hace 80 años: 9 de febrero de 1940. En Nueva York y en el Madison Square Garden, siempre contra el bombardero Joe Louis y en esa oportunidad perdió por puntos.

Godoy escuchaba jazz antes de los combates y su bata lucía la imagen de un dibujo animado de ese tiempo: el Gato Félix. ¿Años? 27. Peso: 91,15. Estatura: 1,835. Bíceps: 0,380. Tanta precisión es gracias a un libro magnífico: “Arturo Godoy”, de Bernardo Guerrero Jiménez, que incluso contiene el afiche de la película “Grandpa goes to town” (1940), con Godoy de terno, al centro y bailando.

El tiempo pasa, para los deportistas y para los que no los son.

Hay que intentar hacer algo, para que no transcurra en vano.

Y por eso el recuerdo de Godfrey Stevens, en su medio siglo del duelo en Japón.

Y por eso Arturo Godoy, a 80 años de su gran combate.