Deportes Copiapó y Deportes Temuco protagonizan mañana, desde las 20 horas, el partido decisivo del octogonal que arrojará al rival de Deportes La Serena, en la búsqueda del segundo ascenso a Primera División. La cerrada tabla, con ocho clubes distanciados por tres puntos a falta de tres jornadas para completar la temporada, llevó a este minitorneo, que al menos resguardó que en la cancha se dirimiera el acompañante de Wanderers.
El tribunal de disciplina de la ANFP resolverá si se ajusta a las bases que los jugadores que el año pasado defendieron a alguna de las instituciones participantes de este playoff pudieran cambiarse a sus eventuales rivales. El reclamo de Unión San Felipe posee una base sólida. La modificación se efectuó en una reunión y no en un Consejo de Presidentes, como determinan los estatutos. El problema para los aconcagüinos es que al votar otorgaron legitimidad al acuerdo. Si no sufragaban y abandonaban la cita, su posición sería más que sólida.
En la cita dominguera se miden dos rivales muy distintos. Los atacameños, dirigidos por Héctor Almadoz, poseen las características clásicas de los conjuntos de ascenso: trazos largos, intensidad y presión. Muchas veces los entrenadores reproducen en sus formaciones lo que vivieron en su etapa de jugadores.
Maximiliano Quinteros y Francisco Vazzoler son los dos delanteros nortinos y resaltan por su fortaleza y potencia. Se mueven por todo el frente de ataque, arrancando como centrodelanteros. Guardando las proporciones, el exzaguero del Vélez Sarsfield campeón argentino, de la Libertadores y de la Intercontinental 1994, reproduce en su escuadra el papel de Omar Asad y el “Turu” Flores, esos dos tanques que hicieron historia con Carlos Bianchi en la banca. La propuesta resulta. Quinteros anotó los dos goles a Barnechea y Vazzoler regaló un golazo ante Melipilla.
El resto trabaja, con Eduardo Puchetta libre, como en ocasiones lo hacía Christian Bassedas o Roberto Pompei, mientras Ronald González transita como interior izquierdo y el veterano Freddy Munizaga ordena la mitad de la cancha como volante central, con oficio de jugador que conoce el ascenso. Los centrales José Tiznado y Byron Guajardo entienden su papel sin complicarse, mientras el arquero Hernán Muñoz está metido en el partido.
Deportes Temuco ofrece un tranco de equipo de Primera División. El grueso de los titulares actuó en la serie superior e incluso formaron parte del plantel que descendió en 2018. La diferencia la pone Hugo Droguett. El zurdo siempre encuentra espacios para recibir y descargar. Vital frente aCobreloa, inteligente ante el buen Ñublense de Jaime García, cuenta en su espalda con Sebastián Domínguez y Sebastián Díazpara subsidiar su veteranía en el retroceso.
Patricio Lira, su entrenador, fue un volante de buena técnica y de precisa pegada. Esa impronta la transmite en un cuadro que plantea un 4-3-3, aunque por ahora sus extremos Bryan Taiva y Diego Arias no graviten en el funcionamiento.
Con estilos disímiles, pero con la ilusión intacta, Copiapó y Temuco van por el cupo al partido del jueves 23. En una temporada que parece interminable, la B no se agota.