Este nuevo reality de cocina de Chilevisión tiene la virtud de presentar un formato diferente al de “Master chef” (Canal 13) y ser atractivo, aunque por otras razones. Mientras en el programa de Canal 13 la competencia era individual y realmente se veía cocinar a los participantes, en “El discípulo del chef” se compite en grupos y con tal número y variedad de pruebas, presentadas con tanta rapidez y algunas al mismo tiempo, que se hace imposible seguir la preparación de cada plato.

Aquí la gracia es ver a los chefs cabeza de cada equipo —Yann Ivin, Ennio Carota y Sergi Arola— competir entre sí, perder los estribos, sufrir derrotas humillantes y picar cebolla como cualquier mortal. Y es que el duelo final de cada capítulo es entre ellos. Los tres demuestran tener un gran sentido televisivo y saben explotar su histrionismo en escenas en que sacan sangre, sudor y lágrimas a los aprendices de sus teams.

Con Sergio Nakasone a la cabeza —el mismo realizador de “Master chef”—, este nuevo programa tiene un casting acertado, cuyos personajes comienzan a perfilarse de a poco con el correr de los capítulos. Hay dos hermanos que juegan a pelearse; una chica que se crió en un hogar del Sename y que es capaz de enfrentar cualquier dificultad; y un par de mujeres rudas con mínima tolerancia a la frustración. Como suele ocurrir en este género televisivo, hay gente con más problemas para manejar sus emociones que con los cucharones y cuchillos cocineros.

Por su opción, a la hora de editar las imágenes, este programa se acerca más a un reality de convivencia que a un espacio de gastronomía. Hay escenas de mucha intensidad en el fragor de la competencia, pero es poco lo que se ve en la preparación de cada plato. Quizás por eso puede llegar a entretener a más gente, pero puede frustrar a los verdaderos seguidores del arte de cocinar.

Un punto a favor es la conductora Emilia Daiber: simpática, bonita y con buena voz. En sus primeros capítulos, “El discípulo del chef” obtuvo un promedio de 10,8 puntos, logrando el segundo lugar de audiencia en su horario. El alcance promedio de cada edición fue de 2.081.908 personas.