Completó los 216 goles Esteban Paredes y aún no terminaban los festejos cuando se empezaron a escuchar esas frases tan conocidas. “Ya es hora de que se retire”. “Está viejo y no tiene para qué seguir”. “Mario Salas no lo necesita”. “No está considerado en el plantel del próximo año”. Hasta Carlos Caszely se metió en el asunto: “Yo hago el gol y me retiro”.
Tan chilena que es esta costumbre. Por eso llegó a tener tanto éxito la programación farandulera en nuestra televisión. La farándula no es más que la exposición pública de la vida privada de las personas. Pueden exponerla algunos con su propia vida o extraños con la vida de otros. Y mientras más truculenta la historia, mayor audiencia acapara.
Costumbre en los medios y en la sociedad toda. “Anoche llegaron los carabineros, la Marisol los llamó porque el Jorge la estaba boxeando otra vez. Le pega a cada rato”. Los vecinos felices con su nueva noticia.
Y ahora, todos se sienten con derecho a meterse en las decisiones personales de Esteban Paredes. Él sabrá cuándo se retira. Imagínese que decida seguir su carrera en China y colgar los chuteadores en Beijing. “Zaijian” (adiós) diría ante la multitud china, que gritaría “Gracias, Esteban”, en perfecto castellano. Paredes puede despedirse cuando quiera (y no le crujan demasiado las bisagras) y donde quiera (que le ofrezcan contrato). Que se haya metido el “Chino” en el asunto es el colmo: él, como gran goleador que fue, sabe mejor que nadie que no es agradable que otros se metan en los temas personales. Nadie le decía cómo debía tirar los penales y no aceptaba críticas cuando se perdía de alguna concentración.
Otra cosa que se ha puesto de moda después del gol 216 es comparar al goleador histórico con su antecesor, el gran Francisco Valdés. Un tuitero me reclama que a cada rato le dicen: “Es que tú no viste jugar al ‘Chamaco' Valdés”. Lo que parece ser es que en la balanza de algunos hinchas antiguos el legendario armador y goleador era mejor jugador que Paredes, a quien solo le asignan la condición artillero, lo que es muy injusto.
Tampoco hay justicia en la comparación cuando se dice que Valdés fue goleador siendo un creador de juego. No. Como ya se ha escrito aquí, “Chamaco” empezó como hombre en punta e hizo muchos goles como tal y más adelante se hizo mediocampista, arrancándole a los golpes que recibía en el área. De modo que una parte importante de su producción la alcanzó como hombre de área.
Y Paredes, asimismo, además de transitar por el área es un jugador generoso en el pase, en la habilitación precisa al compañero ubicado en posición de gol o en marcarle la posición a otro. O sea, no es un rebotero (o lauchero, como se decía). Es decir, se trata de un buen jugador de fútbol y no es justo echarle en cara a alguien el no haber visto a “Chamaco”. Los he visto a los dos y debe analizarse a cada uno según sus méritos y condiciones.
Así es que, por favor, dejen tranquilo a Paredes. O terminarán pidiéndole que haga una encuesta para que decida si sigue o no.