Las frases de los avisos publicitarios, a un lustro de los hechos y antes del Mundial 2014, adquieren otras formas: “Las ideas no tienen parámetros de negociaciones, son irrenunciables” enseñaba Jorge Sampaoli, cliente del Banco Santander desde el 2011, y ahora convertido en rostro, mientras trota por el campo, la ciudad, y define su oficio: “Un seleccionador selecciona”. Era que no.
Al mismo tiempo participaba en los spots del Banco de Chile, sponsor oficial de la selección.
En uno no hablaba de “la Roja” ni de “Chile”, y en el otro por supuesto que sí.
Al entrenador triunfante se le permitió no solo participar en los avisos de un banco, sino de los dos bancos más importantes de la plaza, y supo negociar bien, tuvo asesores duchos, se fue por los intersticios y la movida le resultó.
Eso no lo hace un entrenador ingenuo e inocente, sino uno con la sagacidad del gato de campo y la destreza de la comadreja, un marsupial omnívoro que así como le hace a las frutas de la estación, también a las cucarachas, vengan huevos y gallinas, demás los pajaritos, alguna hortaliza y lo que sea. Topón y para adentro. Una forma de vivir.
Decía en el spot bendito: “Lo más importante de acercarte a una idea es cuando te emociona y genera en vos conmoción”.
Después de modificar una y otra vez los contratos con la ANFP, siempre a la mejora y por mayores beneficios, y cuando existía un legajo para lo laboral y otro por los derechos de imagen, en algún momento, se encendió la ampolleta: una empresa
offshore.
La idea, sin duda, emocionó a los involucrados: Sebastián Beccacece, Jorge Desio y Sampaoli, el líder del grupo, incluso se conmocionó y a lo mejor hasta lloró, porque es lo que pasa cuando la conmoción es mucha y cuando la contraparte es Sergio Jadue, dirigente absoluto y su compañero total en la gran aventura del fútbol chileno.
En ultramar y lo más lejos de Chile, porque acá los impuestos con demasiado y nada como una empresa
offshore en las Islas Vírgenes Británicas, donde es otro el cantar.
Los tres involucrados tomando mate, quizás los acompaña Jadue y algún asesor legal, la música es rock argentino, la predilecta de Sampaoli, y el oriundo de Casilda escucha el nombre y le gustó: “Alta Lake Investing”.
El rosarino Beccacece no se quedó atrás: “James Bay Investors”.
Y Jorge Desio, nacido en Corral de Bustos, provincia de Córdoba, tampoco: “Greenboro Investors”.
Empresas que son castillos en el aire y nubes de algodón, como cantaría don Alberto Cortez, que en paz descanse.
Pero lo esencial es otro concepto, según recita Sampaoli en el spot, donde es cosa de elegir y darle: “Es muy importante soñar con ideas, las ideas por ahí, le van dando forma a la vida”.