Nadie filma los diálogos como Richard Linklater. Esto es importante, porque sus películas no solo son torrentosas en parlamentos, sino que a menudo están construidas a partir del diálogo, como es el caso de la fenomenal Slacker y de la trilogía iniciada con Antes del amanecer. Nadie consigue ese ritmo fluido e inteligente, esa manera delicada de definir a los personajes por sus palabras y esa forma de acompañar las palabras con la gestualidad precisa. Dirigir diálogos es una de las cosas más difíciles del cine.

Los parlamentos son otra vez un elemento estructural en ¿Dónde estás, Bernadette?, la historia de una mujer que no es lo que estuvo a punto de ser, un relato de pérdida y redención que avanza siempre al borde del sentimentalismo más estridente y lo va eludiendo a través de la sofisticación, la elegancia y cierto humor de baja intensidad.

Bernadette Fox (Cate Blanchett, suprema, extraordinaria) es una dueña de casa en un barrio acomodado de Seattle. Su marido, Elgie (Billy Crudup), es un empleado de alto nivel en Microsoft. Su hija adolescente, Bee (Emma Nelson), colabora con la escuela primaria. Pero Bernadette tiene una relación conflictiva con sus vecinas y con la ciudad. Es una mujer retraída, con cierta fobia social y una abierta aversión a la trivialidad.

Es una personalidad extraña, hasta que sabemos que Bernadette fue la arquitecta más brillante de su generación, que tuvo un proyecto de vanguardia frustrado por la vulgaridad y que después de un parto difícil se dedicó a su hija y abandonó su vocación. Bernadette va ocupando el centro del relato a medida que se revela su condición de artista.

La estrategia que Linklater utiliza para que esto sea así es muy sofisticada. La narradora inicial es Bee, la hija, cuyo punto de vista está condicionado por su propio descubrimiento de la madre. Pero luego entran la intimidad de Bernadette (a través de su chat con una proveedora de India) y más tarde el marido, una psicóloga y hasta un agente del FBI. El retrato de Bernadette, cada vez más interesante, no se completa hasta el final.

Esta no es una película amarga ni dramática. Al revés, es quizá demasiado optimista. Tributa a una moral de la convicción que siempre será sospechosa de voluntarismo, pero que combate contra la sensación de iniquidad social.

Así es el mundo de Linklater, y lo que lo sostiene es siempre ese modo elegante de narrar y filmar, que no les teme a los desafíos radicales (Despertando a la vida, Boyhood) ni a las formas de apariencia más convencional, como las de esta película. Linklater ha conseguido hacer que el devenir vital de su generación funcione como una metáfora de toda la existencia moderna. Es un cineasta de los grandes, aunque no todas sus películas sean igual de grandes.

Where'd You Go, Bernadette
Dirección: Richard Linklater.
Con: Cate Blanchett, Billy Crudup, Emma Nelson, Kristen Wiig. 120 minutos.