¿Sabía usted que en la iglesia de El Monte hay una calavera que, se cree, es la de José Miguel Carrera? ¿Qué el Salón Dorado del Palacio Cousiño fue hecho a imagen y semejanza del Salón de los Espejos del Palacio de Versalles? ¿O que los cerros del Parque Metropolitano se riegan por goteo con un embalse que acumula 15 millones de litros de agua? Datos como estos ha revelado el programa “Secretos urbanos”, que Mega exhibe los sábados a las 18:30 horas y que repite en la medianoche de ese mismo día.

El conductor del espacio es Koke Santa Ana, quien se instala en algún parque de la capital a jugar “SanTRIVIAgo” —un juego de tablero sobre datos del Gran Santiago— con un actor o actriz conocidos. Las preguntas los van llevando a diferentes lugares donde los reciben personajes de la historia de Chile, encarnados por otros actores, quienes les cuentan en primera persona distintas situaciones de sus vidas desde el lugar de los hechos.

Pero también aparecen protagonistas de estos tiempos. Por ejemplo, en una visita al Instituto Nacional, Koke Santa Ana y su invitada, la actriz Carolina Arredondo, fueron recibidos por el propio expresidente Ricardo Lagos y por el escritor Antonio Skármeta, exalumnos del emblemático liceo, quienes recordaron anécdotas y se atrevieron a develar sus notas y sus anotaciones de conducta en los libros de clases que todavía están ahí. En el mismo episodio, el propio pintor Mario Toral le explicó a Carolina el significado de su mural “Memoria visual de una nación”, que se luce en la estación de metro Universidad de Chile con sus 1.200 metros cuadrados.

En este programa el juego “SanTRIVIAgo” en realidad es una excusa para hablar de aquellas historias que han ocurrido en la capital a lo largo de los siglos, pero que se han ido olvidando. Está lleno de datos sorprendentes y de personas reales que se han dedicado a cuidar este patrimonio que el común de la gente desconoce. Y no sólo están las preguntas del tablero. Los propios personajes históricos y reales que reciben a los participantes les van haciendo preguntas para saber si han comprendido sus relatos. Eso permite que el televidente también vaya aprendiendo, casi sin darse cuenta y en forma entretenida.

Parte de la gracia de “Secretos urbanos” es que registra la ciudad y sus alrededores con imágenes que la hacen ver hermosa. También que los actores que interpretan a los personajes históricos están realmente compenetrados en sus papeles. Por nombrar a algunos, se mostró a una Inés de Suárez (Francisca Walker) que daba pena con sus cuitas amorosas y de sobrevivencia, y a una Isidora Goyenechea (Camila Hirane), pudorosa y modesta, que no disimulaba el orgullo por su familia ni la preocupación por sus trabajadores.

El programa ya lleva seis ediciones al aire y le faltan otras seis. En un horario que no es de mucha audiencia, lidera el rating con 5,6 puntos de promedio. Quizás podría obtener una mayor sintonía si fuera programado en otro momento. Por ahora, es un buen ejemplo de que un programa educativo y cultural puede ser entretenido.