Señor Director:
Se ha mencionado erróneamente a la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile como el conjunto que acompañó a Raphael en el Festival de Viña. Se trata de una confusión que se ha dado antes debido al nombre que la "Filarmónica de Chile" se ha atribuido.
Es lamentable que privados con fines comerciales se apropien de un nombre incluyendo la expresión "de Chile", cuando no representan al país ni son un conjunto permanente ni menos de carácter nacional.
Debemos cuidar el nombre y prestigio del país y evitar que se mal utilice una representación nacional cuando no se tiene.
La Orquesta Sinfónica Nacional de Chile fue creada por ley y su carácter de nacional le impone un deber con el país de forma permanente. No es un apelativo decorativo.
Invitamos a los lectores a que se acerquen al Teatro de la Universidad de Chile, sede de la Sinfónica, a apreciar de primera mano la excelencia de una orquesta con 78 años de actividad musical ininterrumpida.
Diego Matte
Director Centro de Extensión Artística y Cultural
Orquesta Sinfónica Nacional de Chile